Así lo aseguró el Ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, tras concluir el Comité Nacional de Cafeteros.

El Gobierno Nacional y las FARC sientan un histórico punto de partida hacia una Colombia en paz.

Para que esta paz sea duradera deben estar involucrados todos los demás grupos insurgentes y actores del conflicto porque puede suceder que los miembros insurgentes inconformes con los acuerdos lo que hagan sea cambiarse de brazalete.

Según el presidente, con lo que se acaba de firmar, Colombia le da vuelta a una trágica y larga página de la historia. Hablan AmCham y petroleras.

Industriales, obreros y gobierno ven en la paz un activo importante de cara al progreso y a recuperar décadas de atraso con cargo a un conflicto fratricida que no dejó sino pérdidas.

Las delegaciones de paz tanto del ejecutivo como de la insurgencia alcanzan un acuerdo histórico que pone a Colombia en otra órbita económica y social.

Colombia está en situación de ajuste económico y surge una inquietud: ¿cuánto vale la paz?

Con el anuncio de una fecha límite para la firma del acuerdo final de paz entre el Gobierno Santos y las FARC, se fortalece la posibilidad de un crecimiento económico superior en Colombia para el próximo año.

Los analistas tienen reacciones encontradas, pero dicen que si hay paz habrá una perspectiva económica importante.

El presidente de los colombianos dijo que la paz está muy cerca y aseguró que habrá justicia y reparación.