Jueves, 23 Enero 2020 21:10

Recuperación económica viene con moderado optimismo: BBVA Research

Por

Para la entidad, la economía colombiana crecerá 3,2% en 2020 y 3,5% en 2021, continuando la senda de recuperación mostrada en los años anteriores.

La economía colombiana crecerá un 3,2% en 2020 y un 3,5% en 2021, continuando la senda de recuperación mostrada en los años anteriores, según se desprende del informe ‘Situación Colombia’ que contempla las proyecciones económicas realizadas por la entidad para este año y el próximo.

 

“El balance de crecimiento es mejor en 2020 y 2021 frente a 2019. En 2020, el desempeño de la economía estará marcado por la inversión, con un crecimiento de 5,0%, más que lo estimado al cierre de 2019, cuando se debió ubicar en 4,1%.”, afirmó Juana Téllez, economista jefe de BBVA en Colombia.

 

A nivel sectorial, la construcción de edificaciones liderará el crecimiento en 2020 y 2021, luego de un par de años de bajo desempeño, al dar una vuelta de 180 grados y pasará de una contracción a una expansión de 5,5% motivada por el buen comportamiento en la vivienda de interés social y una estabilización en el comportamiento de los demás grupos de vivienda.

Asimismo, se espera un buen comportamiento en sectores como el comercio y servicios a empresas, entre otros. No obstante, según comenta el análisis, los sectores transables como industria y minería, siguen rezagados, en especial por el débil comportamiento del crecimiento global y las exportaciones colombianas.

 

“En el frente externo, comenzamos a observar en 2021 alguna recuperación paulatina en las exportaciones reales, sin embargo seguirán creciendo por debajo del PIB. Por otra parte, la moderación en el crecimiento del consumo y de la inversión en maquinaria y equipo ayudarán a reducir la presión de las importaciones sobre la economía, ello permitirá una moderación del déficit externo a 3,9% del PIB en 2021, no obstante, el aporte de la demanda externa al PIB continuará siendo negativo”, agregó Téllez.

 

Incertidumbre y desbalances presionan tipo de cambio

 

En cuanto al mercado cambiario, de acuerdo con el análisis hecho por BBVA Research, el tipo de cambio se mantendrá en niveles elevados, en promedio en 3.271 pesos para 2020, similar al valor medio de 2019 que se ubicó en 3.281 pesos, lo que implica una apreciación de 0,3% en el año, luego de haber registrado una depreciación del 11% en 2019.

En lo que corresponde al comportamiento de la inflación, BBVA Research estima que se moderará en 2020 y 2021, cerrando en 3,4% y 3,2%, respectivamente, como consecuencia de una reducción de la inflación de los alimentos, la moderación de la depreciación y la finalización de algunos choques de oferta que afectaron el comportamiento del indicador en 2019.

 

“Para este año estimamos que la inflación anual se mantenga elevada, en torno al techo del rango meta hasta el mes de marzo, para luego comenzar a descender hasta cerrar el año en 3,4%. Entre los riesgos que enfrenta la inflación de cara a 2020 están una mayor transmisión de la depreciación del tipo de cambio, el efecto del incremento del salario mínimo para este año, y posibles ajustes represados a medida que la demanda mejore”, señaló Téllez.

 

2020, un año de estabilidad en tasa de interés



Por otra parte, en lo que respecta a las decisiones de política monetaria que tome el Banco Central, BBVA Research prevé que en el actual contexto, el Emisor mantendría quietas sus tasas, en 4,25%.

La economista añadió el Emisor tiene factores que presionan al alza (inflación, depreciación y balance externo) y factores que presionan a la baja (desempleo, brecha de producto negativa). Estos último factores, consideró, se moderarán paulatinamente en 2020 y comienzos de 2021, con lo que se espera un incremento en tasas de 25 puntos básicos en el primer trimestre de 2021.

 

Metas fiscales se cumplirán en el corto plazo

 

La entidad considera que el objetivo fiscal para 2020 se alcanzaría por cuenta de algunos ingresos extraordinarios de capital que no se repetirían en adelante. BBVA Research indicó que para 2021, lograr el objetivo fiscal presenta mayores retos, ya que es más exigente, situándose en 1,8% del PIB la meta por la regla fiscal. Y por otra parte, conceptuó, el incremento en ingresos y la reducción en gastos son limitados dados los ajustes que se incluyeron en la recientemente aprobada Ley de Crecimiento (reforma fiscal), lo cual haría necesaria una estrategia de mejora de ingresos o reducción de gastos (preferiblemente de carácter estructural), en ambos casos con importantes retos por el momento político y social vigente.

De otro lado, expresó que el elevado déficit en cuenta corriente y su financiación es un reto importante para la economía colombiana en 2020 y 2021. De acuerdo con estimaciones de la entidad, el déficit se moderará a 4,2% en 2020 y 3,9% en 2021, sin embargo, seguiría siendo el más elevado de los principales países de la región.

Finalmente la economista Juana Téllez, aseveró en Diariolaeconomia.com, que este año es de esperanza frente a un mejor crecimiento sobre todo mejor balanceados porque se espera un 2020 con crecimientos del 3,2 y en 2021 de 3,5 por ciento lo cual será mejor porque se espera una inversión mucho más dinámica, un consumo que se mantendrá bien, pero no tan fuerte lo que deja ver una buena combinación.

 

“Otro aspecto que estamos viendo es una disminución en el déficit de cuenta corriente que sigue siendo un reto porque el año pasado este indicador debió terminar alrededor del 4,6 y este año seguramente estará por el orden del 4,3 por ciento del producto interno bruto, PIB, lo que corrobora que el tema sigue siendo un gran desafío”, declaró la economista.

 

Agrego que términos de cosas adicionales que hay que cuidar muchísimo está por ejemplo el empleo, tema nada fácil porque aún se siguen perdiendo puestos de trabajo a nivel nacional y se cran muy pocos en el total de las trece ciudades, escenario muy difícil que igual se convierte en un reto, eso sí viendo mejoras desde la entidad crediticia y su centro de análisis en el segundo semestre del año cuando el desempleo deberá bajar para terminar muy afín con 2019 y retomar tasas positivas en 2021.

Sobre el tema geopolítico, Téllez apuntó que las cosas mejoran con los acuerdos iniciales a los que lograron llegar Estados Unidos y China pues el contexto es más alentador hoy que el de hace tres meses cuando había mucha más incertidumbre. Lo anterior, puntualizó, muestra que en primer lugar los bancos centrales del mundo van a tener tasas bajas por mucho tiempo, una ventaja importante para países como Colombia y como habrá menos incertidumbre, seguramente menor será la volatilidad en 2020 y 2021.

 

“Son buenas las noticias, el mundo no crecerá a tasas espectaculares ya que lo hará a razón de 3,2 por ciento que no es positivo para el globo, pero por lo menos deja ver menos riesgos que los observados hace un par de meses y por ese motivo tenemos un optimismo moderado, eso sí dejando claro que nos preocupa que no hay un crecimiento en las exportaciones colombianas en la medida en que el mundo no va a crecer mucho y no redundará en demanda para nuestras exportaciones”, señaló la experta.

 

En opinión de la economista otra tarea pendiente y que debe hacerse con urgencia es encontrar otros productos de exportación porque seguirá siendo de alto riesgo pensar que la economía solamente debe girar en torno al petróleo y a la minería, asunto que de no ser corregido podría traer choques con sus respectivos costos porque el país se quedó en crudo y no diversificó su oferta exportable, asumiendo riesgos y omitiendo unos cambios que pedía el país a gritos. Es increíble que después de la tremenda experiencia de hace unos años, Colombia tenga un 70 0 75 de las exportaciones de Colombia sigan siendo de productos básicos.

Destacó que pese a la coyuntura hay casos exitosos en agricultura y en industria que en medio de todo no dejan de ser marginales. Hoy, analizó, el país no tiene la disculpa de la tasa de cambio porque a la fecha es mucho más competitiva y consideró que de cara a mejorar en ese frente, es perentorio revisar el costo del transporte y el mismo valor de la electricidad, aspectos que sumados a otros hacen que Colombia no sea viable ni competitiva a nivel internacional.

Concluyó que la construcción que cayó el año pasado a tasas del cinco por ciento en 2020 perfila recuperación y crecimiento lo cual se explica en mayor dinámica de interés social y mejoras en vivienda de clase media y algo en otros destinos como oficinas y obras civiles que si bien no serán de gran factura aportarán al cambio de la tendencia y al crecimiento.

La reforma tributaria que trajo consigo rebajas impositivas sobre la renta para las empresas, expuso la analista, traerá mayor inversión así como mucha más dinámica con la rebaja del IVA los bienes de capital.

Visto 710 veces