El 2019 fue un año positivo para la Banca de Desarrollo Territorial, Findeter, que logró generar más ingresos con menos recursos, lo que se traduce en una mayor rentabilidad y una mejora en la eficiencia operativa, así lo reveló la presidente de Findeter, Sandra Gómez Arias.
De acuerdo con la presidenta Gómez, el indicador “eficiencia operativa”, se ubicó en 1,40%, lo que representa una mejora de 11 puntos básicos respecto al 2018, explicado principalmente por la administración eficiente del gasto.
Los indicadores de rentabilidad también mostraron variaciones positivas durante 2019; el “ROE” o retorno de la inversión presentó un crecimiento de 2018 a 2019 de 1,09%, gracias una adecuada administración de los gastos operacionales y al crecimiento del patrimonio.
En cuanto al Ebitda, que muestra el beneficio antes de intereses, depreciaciones y amortizaciones, este aumentó en $23.498 millones respecto al 2018 al pasar de $95.496 millones a $119.443 millones, como resultado del crecimiento de la utilidad operacional en $29.912 millones.
Los ingresos operacionales de Findeter durante 2019 aumentaron un 11,06% frente a 2018 pasando de $1,68 billones a $1,86 billones.
Las utilidades alcanzaron un nivel récord de $73.911 millones, lo que resultó en una variación anual de $17.351 millones, frente a 2018, equivalente a un crecimiento de 30,68% y constituyéndose de esta forma en las mayores utilidades en la historia de la Entidad.
Con respecto a la cartera bruta de la entidad, esta creció 4,47% en el último año y se ubicó al cierre de diciembre de 2019 en $8,92 billones, lo que corresponde a $381.180 millones, manteniendo la tendencia positiva de los últimos 6 años. Vale la pena destacar que el 59,19% de la cartera de redescuento corresponde a tasas compensadas y líneas especiales.
En cuanto a los desembolsos, estos alcanzaron los $2,73 billones en 2019, mientras que en 2018 se desembolsaron $2,26 billones. Los recursos fueron para financiar proyectos de infraestructura en transporte, agua potable y saneamiento básico, infraestructura urbana, salud, energía, educación, entre otros.
Finalmente, en cuanto a las cuentas del balance general, el activo total de la Entidad se ubicó en $10,20 billones, creciendo 5% frente al ejercicio del 2018. El pasivo mostró una variación anual de 4,71%, cerrando el año anterior en $8,98 billones y el patrimonio se incrementó en 7,22% situándose en $1,22 billones.