Varias fábricas y no pocos empresarios así como propietarios de comercios, han elevado su voz de alarma toda vez que el cierre de 2018 dejó un sabor agridulce en vista que no hubo la gran demanda que esperaban los sectores de manufactura en la temporada navideña y de año nuevo. En los primeros días de enero, la situación refleja poco dinamismo y al parecer muchos frentes productivos empezaron el año con dificultades.
El presidente de EasyFly, Alfonso Ávila Velandia, le dijo a Diariolaeconomia.com, que en términos generales la economía no tiene un panorama muy claro, empero manifestó que para el caso particular de la aerolínea, hay una coyuntura muy especial porque la marca está entrando de manera exitosa en varios mercados muy a pesar de que el sector aéreo no ha crecido y está creciendo a unos porcentajes muy pequeños en relación al ritmo que traía y que era del 10 por ciento aproximadamente. En 2018 ese crecimiento fue solamente del dos por ciento.
Caso opuesto EasyFly es una excepción, anotó el empresario, porque crece a un ritmo del 25 por ciento en los años anteriores y las cosas pueden mejorar porque hay al interior de la firma un ambicioso plan de expansión ya que la flota viene aumentando en 70 por ciento con lo cual el número de sillas crece en la misma proporción, razón por la cual la compañía espera un crecimiento similar. Agregó que Colombia todavía es un país desconectado en sus regiones más apartadas y en las ciudades intermedias en donde siguen los líos de conexión, pero aclaró que por eso EasyFly trabaja intensamente en conectividad lo que hizo que la empresa identificara muchas ciudades que no cuentan con una conexión directa con los centros comerciales e industriales más importantes.
Explicó que para ir de una ciudad a otra, el viajero tiene que pasar por Bogotá, lo cual es poco eficiente porque una persona que tenga que viajar con regreso el mismo día, no lo puede hacer mientras que con EasyFly sí lo puede llevar a cabo y sin contratiempos. Es por eso que la gran mayoría de rutas que en los desplazamientos tomaban cuatro o cinco horas, con EasyFly tardan entre media hora o cuarenta minutos porque la empresa hace la conexión punto a punto.
“En EasyFly estamos creando nuevas rutas, estamos desarrollando este tipo de conexiones que no tenía el país y por ello este año, esperamos un crecimiento sumamente importante porque en pasajeros el estimativo es crecer entre un sesenta y un setenta por ciento, un resultado que de darse será extraordinario porque estamos abriendo nuevas rutas, nuevos mercados y desde luego incrementando nuestra capacidad instalada en término de sillas en un sesenta por ciento”, expuso el señor Ávila Velandia.
Factores como el precio del petróleo que experimentó una caída y la misma tasa de cambio son elementos que impactan fuertemente la operación aeronáutica porque EasyFly y el sector aéreo en general hacen parte de una industria globalizada en lo que tiene que ver con los insumos que requiere para operar. El reconocido empresario dijo que las aerolíneas importan sus insumos en un sesenta por ciento con lo cual el impacto por la variación del dólar es muy sensible en el ejercicio porque cuando la divisa sube, sencillamente esas materias o gastos suben en sesenta por ciento. Además de todo, especificó el empresario, el combustible que pesa un 30 por ciento en los costos operacionales de las aerolíneas tiende a subir por ese efecto combinado en donde la gasolina para los aviones se paga en dólares.
El efecto es doble porque si suben los derivados del petróleo y a la vez el dólar, el impacto es muy grande y eso ha ocurrido en los últimos meses, dejando claro que en los últimos días las cosas han venido mejorando, pero a criterio de EasyFly, la situación no es fácil porque el sector aéreo sigue dependiendo de los precios internacionales del crudo y de los comportamientos de la tasa de cambio, asunto complejo porque en los dos escenarios no hay forma de controlar un fenómeno que depende de oferta y demanda y que cuando reporta picos hace padecer a las aerolíneas.
Una de las tendencias en el mundo, aseguró Ávila, es la fusión de empresas y la compra de algunas aerolíneas para buscar eficiencias porque entre más grande sea una empresa, si las cosas se manejan con eficacia, los resultados son óptimos.
Apuntó que hay unos mercados que no permiten que estas aerolíneas internacionales operen tal y como acontece con los mercados regionales, más exactamente de América Latina porque en esos países las aerolíneas son de tamaño mediano que son altamente eficientes y manejan muy bien ese nicho de mercado.
Colombia sigue pasando del bus al avión
Sin duda alguna el colombiano y el latinoamericano en general están buscando competitividad en sus negocios y por ello el tiempo es un activo al que le quieren dar mejor uso. Por precios, por comodidad y por la facilidad de hacer todo en un día, el viajero está dejando el bus intermunicipal de lado para buscar las alas y hacer sus diligencias en avión.
El presidente de EasyFly afirmó que en ese sentido hay un fenómeno que está ocurriendo y que obedece a dos factores. Desde el año 2008, dijo, empezó tímidamente un desplazamiento de los pasajeros que utilizaban el bus para movilizarse al transporte aéreo lo cual es un caso interesante porque al ver las estadísticas disponibles que lamentablemente están algo desactualizadas, muestran que el transporte terrestre de Brasil, México y Colombia tiene una tendencia en donde el uso del avión crece en tanto el modo de carretera disminuye. En opinión de Ávila esa tendencia se da porque la clase media está aumentando y también porque la relación entre el costo del tiquete y el ingreso promedio de las personas en estos países está aumentando.
“Uno podría expresarlo en términos de salarios mínimos porque antes viajar una hora en avión costaba aproximadamente la mitad de un salario básico mensual, ahora ya hay pasajes que cuestan un 25 por ciento de ese ingreso o menos porque hay pasajes de 150 mil pesos y están las oportunidades mucho más económicas ya que las empresas ponen pasajes a 96.000 pesos.
Con nuestra operación a Neiva en donde aumentaremos la operación, tenemos tiquetes a 96.000 pesos el trayecto, es decir que logró reducirse el costo del pasaje en avión y aumentarse el poder adquisitivo de quienes hacen uso del transporte aéreo”, añadió Ávila.
La situación es más que visible porque mientras la operación aérea crece a niveles del 10 por ciento, el tráfico terrestre o el de los buses cae a tasas del dos y el tres por ciento, lo que explica porque algunas empresas de buses interdepartamentales están migrando al negocio aeronáutico. Esta tendencia, expresó el presidente de EasyFly, debe ser un poco más acelerado en los países andinos en donde las opciones para ir de un lugar a otro son muy limitadas y carecen de calidad en tanto que en Europa está la posibilidad de abordar un tren, de acudir a la carretera o subir a un avión. En Colombia el tema es sencillo, “Se aborda un avión, se aborda un avión o se aborda un avión” porque la otra alternativa implica gastar entre 12, 14 o 16 horas entre un sitio y otro cuando no más.
El tema es apenas consecuente porque entre Medellín y Quito por citar un ejemplo hay doce horas en bus, en avión el tiempo de vuelo es apenas de 25 minutos.
Ante una pregunta recurrente una respuesta recurrente, EasyFly está concentrada al ciento por ciento en la conectividad de Colombia en donde hay un potencial importante que comparativamente no se ve en los vuelos al exterior porque mientras en el país la aerolínea es pionera en muchos de los mercados en donde participa, en el extranjero la firma sería una aerolínea más con otros competidores que hacen el mismo trabajo en tanto que en Colombia EasyFly desarrolla las rutas y conecta ciudades intermedias con centros comerciales importantes, facilitando la dependencia comercial de los cascos urbanos o capitales que no lo ven muy fácil puesto que no hay un buen servicio de transporte aéreo.
Las llamadas poblaciones intermedias dependen mucho de los centros comerciales e industriales de gran importancia en Colombia y es por ello que muchos buscan llegar a Bogotá, Medellín, Cali, Barranquilla y Bucaramanga a donde la gente acude a comprar mercancías, productos, a hacerse tratamientos médicos, a educarse en las universidades y a desarrollar otras actividades demostrando el alto grado de dependencia.
En 2018 EasyFly transportó 1.2 millones de pasajeros que representaron ventas por más de 300.000 millones de pesos, un crecimiento del 24 por ciento.
El presidente de AesyFly, Alfonso Ávila, manifestó que por fortuna esta aerolínea es la que mayor crecimiento tiene en el país. El secreto, dijo, no es nada diferente a lo que buscan los emprendedores lo cual consiste en ofrecer algo nuevo porque la empresa está convencida que debe ser pionera en rutas con equipo de muchísima calidad y con un servicio de elevada eficiencia.
El desarrollo de una ruta nueva no es asunto fácil porque la aerolínea generalmente hay un periodo de pérdida importante y por ello la autoridad aeronáutica tiene una protección para el pionero que ejecuta una inversión. Dicha protección cubre los dos años.
“Estamos haciendo algo nuevo y en términos de creatividad, le damos vida a una nueva ruta a donde se llega en media hora, es decir que tenemos una propuesta ganadora porque el modelo de empresa permite ser exitoso. El compromiso es tal que en un año, EasyFly va a estar presente en 32 ciudades de Colombia, una cobertura del 70 por ciento a nivel nacional con algo muy satisfactorio y es la acogida del público”, aseveró.
Uno de los puntos tratados fue el de las aerolíneas famosas, de enorme musculatura que súbitamente salieron del mercado en el mundo. En este interesante tema, Ávila indicó que cada aerolínea tiene sus fortalezas y sus debilidades, pero reconoció que años atrás, las empresas se dedicaron a vender más de lo mismo hasta saturar el mercado. Esa falta de hacer algo nuevo llevó a que muchas empresas del sector aéreo fueran abandonando la industria por la fuerza de sus competidores. A demasiadas, sostuvo Ávila, les faltó pensar en el futuro, en innovación, en servicio de calidad y en valores agregados.
“A EasyFly, por fortuna, no le gusta copiar lo que hacen los demás, no en vano nuestros vuelos directos representan el 70 por ciento”, recalcó.
Alfonso Ávila es un hombre muy respetado en el sector aéreo por sus fabulosos conocimientos y por la capacidad empresarial que ratificó con la fundación de dos empresas caracterizadas por el éxito. Luego del relicario de quiebras de aerolíneas en la década del noventa, los expertos dijeron con admiración, “Alfonso algo debe estar haciendo bien”.
Al igual que en los carros y los camiones en donde la tecnología ya permite que estos vehículos transiten sin conductor, en aeronavegación también hay aviones que pueden perfectamente volar solos. La vertiginosa tecnología no para y las aeronaves siguen avanzando en la adopción de nuevos dispositivos y mecanismos que avalen mayor tranquilidad en vuelo pues un avión puede ser operado con la facilidad de los drones, pero esos avances no llegarán tan pronto por el concepto de seguridad aérea. Aparte de todo hay aviones y desarrollos que evitarán los accidentes porque los equipos podrán hacer uso de mecanismos paralelos que facilitan la estabilización de la nave cuando eventualmente el principio básico falle, es decir que un avión puede arrancar como tal, pero descender como helicóptero.
Las nuevas evoluciones buscan que los accidentes aéreos que hoy son relativamente pocos, lleguen a cero y no es de extrañar que las nuevas aplicaciones y desarrollos sean presentados antes de lo que muchos se imaginan.
Este es la aerolínea EasyFly, la única que conecta a Colombia generando sinergias y llevando oportunidades a un precio módico y justo porque a la hora de montar en avión el único cinturón que debe apretarse el pasajero es el de seguridad, por lo demás no hay lío, la empresa lleva y trae colombianos así como a extranjeros porque el turismo con esta empresa sí que tiene futuro.