El informe, citado por la agencia Reuters, sitúa en 24,49 millones de toneladas las importaciones del crudo iraní entre enero y septiembre, lo que supone un aumento de 4% respecto al mismo periodo de 2017.
Los suministros de petróleo saudí también se contrajeron en septiembre al caer a 3,78 millones de toneladas (o 919.800 barriles diarios), 12% menos que el año anterior.
En mayo pasado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la retirada de su país del pacto nuclear, acusando a Teherán de desarrollar en secreto un programa nuclear, pese a que 12 informes consecutivos del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) afirmaron lo contrario.
En agosto Washington restableció las sanciones unilaterales contra el sector automotor de Irán, el comercio en oro y metales preciosos, así como las relacionadas con la moneda iraní.
El 4 de noviembre deben volver a entrar en vigor las demás restricciones que habían sido suspendidas por EEUU en el marco del acuerdo nuclear, entre ellas las relacionadas con el sector petrolero.