La Navidad es una fiesta de dimensiones colosales. Además de ser la festividad más importante en cualquier país cristiano, su influencia económica resuena en todos los países del mundo. Ya sea en base al turismo, la producción o los festejos, la Navidad sin lugar a dudas toma un lugar protagónico en el fin de año.
En esta oportunidad, vamos a tratar de hablar y poner en números todo tipo de cosas de Navidad. Desde su importancia en el mundo hasta los datos más puntuales. Además, para usar como ejemplo el peso de la decoración navideña, profundizaremos un poco en la evolución de las luces de Navidad.
La Navidad en números
Si los sumamos a todos quienes festejan la Navidad, este grupo llega a gastar mil millones de dólares lares. Esto significa que, en promedio, cada persona gasta una media de 500 dólares en Navidad.
Claro que este promedio no es estable, ya que en los países ricos se gasta una cantidad enorme de dinero, generalmente bastante más de 500, mientras que en aquellos en vías de desarrollo el número de gastos en decoración Navideña 2023 es menor.
Para poner un ejemplo de esto tenemos a los árboles de Navidad. Solo en América (Norte y Sur), más de 500 millones de árboles artificiales son vendidos todos los años, y esto sin tener en cuenta los números de los árboles naturales.
Sin embargo, como podrán imaginar, este número no está distribuido de forma pareja, ya que solamente Estados Unidos cuenta con más de la mitad de este mercado.
Con esto podemos ver una variedad de gasto en adornos navideños 2023 y otros productos se da a lo largo del mundo. Y esto fue solo teniendo en cuenta un par de países, con una rápida búsqueda podrán tener un buen índice económico tomando el gasto navideño en países con mayoría cristiana.
La Navidad también aparece como una de las fiestas turísticas más importantes del mundo. Aunque, siendo sinceros, esto se debe más que nada a que coincide con las vacaciones de verano en el hemisferio sur y las de invierno en el norte.
De todas formas, la Navidad es una época en la que muchas personas viajan para visitar a sus seres queridos o para disfrutar de eventos especiales de vacaciones.
La Navidad en Japón: una fiesta globalizada
Podemos encontrar un gran ejemplo del funcionamiento de la Navidad como fiesta comercial (además de religiosa) en el cómo, es vivida por los países que no tienen una mayoría cristiana, judía o musulmán, es decir aquellas más ajenas a la fiesta. De una u otra manera, esto no evita que año a año podamos ver completamente a muchos de ellos llenos de adornos navideños.
Vamos a tomar como ejemplo a Japón, donde la mayoría son practicantes del budismo, el shinto o directamente no religiosos. A pesar de esto, los arreglos navideños se hacen presentes por todo el país en un espíritu navideño que, a simple vista, no parece tan diferente de cualquier otro país cristiano.
Aunque el cristianismo tiene una larga historia en Japón, este no ha logrado penetrar con demasiada profundidad a su cultura, por lo que la mayoría de los japoneses conocen esta fiesta por series y películas extranjeras.
Esto hace que para ellos la Navidad tenga una fuerte asociación con la decoración navideña moderna y no tanto con la festividad religiosa. De una u otra forma, los japoneses realmente adoran esta fiesta, aunque para ellos no tenga el mismo significado e historia que para nosotros.
Luces de navidad
Las luces de navidad son un mercado siempre creciente desde su misma invención. Aunque la tradición de decorar árboles de navidad es relativamente antigua, el pasaje de decoración tradicional a las luces representó un enorme cambio.
Este es un caso extraño en el que una nueva invención no logra desplazar por completo a su antecesor, ya que, como todos sabemos, hoy en día las luces de navidad son una parte más de la decoración navideña.
Sin embargo, es verdad que, desde su introducción y popularización masiva, las luces de Navidad han logrado desplazar en buena parte a la decoración tradicional. Aunque esta sigue existiendo, las luces suelen ser mucho más sencillas de instalar, lo que simplificó bastante la decoración.
Anteriormente, una buena parte de la decoración navideña era hecha a mano, ya sea en los mismos hogares en los que iba a ser usada o en tiendas. Esta no era barata y estaba compuesta de elementos simples como papel de colores u otros.
Con la llegada de las luces navideñas (y sumado a la decoración a gran escala) la producción artesanal bajó muchísimo, mientras que en paralelo estas se posicionan como un jugador clave en el mercado navideño.
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Los diferentes tipos de luces de navidad
Pero las luces de navidad están lejos de ser un único tipo de producto. Con el tiempo, estas lograron diversificarse y especializarse en base a su uso. En general, podemos distinguir dos tipos de luces navideñas: las usadas para árboles o interiores y las de uso exterior.
A su vez, es posible separarlas según el tipo de tecnología en lámparas navideñas tradicionales, las LED y las solares. Podemos agregar también que estas últimas pueden ser LED o tradicionales.
En el caso de las tradicionales nos referimos a las clásicas luces de pequeños focos. Estas en general son mucho más baratas que las LED o las solares, y realmente no hay demasiada diferencia en su calidad.
Sin embargo, también es verdad que tienen un consumo de electricidad bastante mayor que las LED o, obviamente, las solares. Esto las vuelve una buena opción para lugares pequeños o decoración navideña de oficina, pero al mismo tiempo una no tan buena en casas o departamentos muy grandes.
Después de esto tenemos las luces LED. Estas pueden ser un tanto más caras que las tradicionales, pero su consumo es menor. Y por último nos encontramos con las de consumo negativo, es decir, las de energía solar.
Es verdad que estas son un tanto más caras, pero al recibir energía del sol, no representan ningún tipo de gasto eléctrico, por lo que pueden usarse indefinidamente.