Enviado Especial a Santa Marta
Si bien al acto de presentación de la nueva política no asistieron las dignidades ni las organizaciones campesinas e indígenas así como de negritudes, el Ministerio de Agricultura ratificó que este es un programa integral que cubrirá a más del 70 por ciento de la comunidad campesina.
El jefe de la cartera agropecuaria, Aurelio Iragorri Valencia, afirmó que este nuevo programa del ejecutivo cubrirá el programa, “Economía Familiar Campesina” que tiene en la mira el mejoramiento de la calidad de vida y la optimización de los ingresos en el campo.
Hizo énfasis en que los campesinos, los indígenas y las negritudes hablarán con él y sus funcionarios en la Cumbre Agraria que se cumplirá en octubre. Sobre este programa resaltó todo lo que tiene que ver con sustitución de cultivos ilícitos y toda una renta campesina que se viene con los nuevos planes para el sector agropecuario.
“Este es un proyecto serio y muy transparente que les ayudará a los pequeños campesinos, claro está que habrá agroindustria que ocupará también un capítulo especial y la idea es empujar al campo en cadena, con todos sus actores”, dijo.
Descartó riesgos en la nueva política y dijo que se caracteriza por su probidad y total transparencia que está tras la siembra de un millón de hectáreas de paz.
Explicó que en aras de ayudar a más campesinos, el gobierno hará modificaciones a la tabla que precisa quien es pequeño, mediano o grande. Así las cosas, dijo, pequeño es quien tiene un activo en el campo por 90 millones de pesos, mediano quien declara uno por más de 3.000 millones y grande de esos 3.000 millones hacia arriba.
“Este es un programa de inclusión y de perspectiva, no tiene nada que ver con AIS, el país no puede seguir en pánico o bloqueado por culpa de ese antecedente”.
Iragorri invitó a los campesinos colombianos y a la agroindustria a inscribirse a este plan que tiene como meta la reactivación de la economía campesina.
Agricultura Davivienda: En el lugar equivocado
El ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Aurelio Iragorri Valencia, afirmó que los productores campesinos están generando un problema para nada de poca monta toda vez que están sembrando alimentos en sitios no adecuados lo cual genera desordenes productivos y sociales.
Al hacer el lanzamiento del programa, “Colombia Siembra”, el jefe de la cartera agropecuaria anotó que a la fecha hay 1.9 millones de hectáreas de cultivos que están sembrados en el lugar equivocado.
Aseguró que muchos productos son sembrados sin estudios previos de suelo y sin el análisis de piso térmico.
Sobre el fenómeno climático de El Niño, Iragorri Valencia sostuvo que si bien el gobierno está preparado para atender la coyuntura, lo ideal es que haya prevención y poder atender riesgos y no desastres.
El funcionario dijo que Colombia debe retomar el derrotero de su economía rural porque no tiene sentido que el país importe 10.3 millones de toneladas de alimentos al año, es decir gastando en ese rubro más de 1.600 millones de dólares.
Al responder sobre los impactos de la apertura económica, Iragorri señaló que no es amigo de mirar el espejo retrovisor pues dadas las condiciones se trata de hacer un tercer relanzamiento para que el sector agropecuario se dinamice ayudando con el crecimiento económico, con el empleo y con el progreso.
Aseguró que en diciembre el país conocerá la nueva institucionalidad del agro en donde se presentarán agencias especializadas que catapultarán la economía campesina.
No descartó la presencia de inversión extranjera en el campo lo cual reducirá los gastos del gobierno en el frente rural. Con la nueva política, explicó, habrá opción de que los nuevos inversionistas le apuesten al sector rural. En ese orden de ideas se les pidió a las Secretaría de Agricultura tener un paquete de información listo para tener una herramienta ágil y versátil para los interesados.
Para el jefe de la Cartera Agropecuaria, sería ideal que los productores se focalizarán en el cultivo de productos como maíz, cebada y soya que representan el 70 por ciento de las importaciones.
Estimó muy conveniente apostar por frutales, caña de azúcar, panela, caña de azúcar y arroz. En lo que tiene que ver con productos opcionales y con perspectiva, dijo que hay buenas oportunidades en carne, cacao y aguacate.
Destacó las inmensas posibilidades que tiene Colombia en los productos exóticos como la gulupa, el mango, la piña, la granadilla, la uchuva y el limón Tahití.
Iragorri fue claro en que la recuperación del campo será de mediano y largo plazo porque por citar un ejemplo a Ecuador le tardó diez años recuperar su seguridad alimentaria, puntualmente en los cultivos de maíz.
El ministerio de Agricultura es el quinto en presupuesto toda vez que cuenta con 3.5 billones de pesos, motivo por el cual Iragorri insisitió en la eficiencia del gasto.
En opinión del Ministro, hay un lío delicado y es que este despacho y sus representantes son lejanos y carentes de presencia en la ruralidad. Por tal razón consideró urgente contar con un ministerio de canales abiertos de diálogo y concertación, de presencia con las comunidades para evitar paros y movilizaciones campesinas. “La política agropecuaria debe basarse en el diálogo social, en la descentralización y no en lo que diga un funcionario encorbatado desde una oficina en Bogotá”.
Expresó el Ministro, su beneplácito con este nuevo programa que busca sembrar un millón de hectáreas con diversos productos para recuperar de una vez por todas, la seguridad alimentaria.
Reiteró que el país debe darle todo el protagonismo al campesino y al productor primario y evitar o erradicar la intermediación nociva, de igual manera dijo que la economía rural tiene mandados a recoger los zares o los dueños de los subsectores.
Precisó que lo ideal es consumir productos nacionales de buena calidad, con inocuidad, calidad y garantía lo cual les llevará alimentos confiables a los hogares colombianos y opción de trabajo a miles de campesinos.
“Es lamentable que uno abre una despensa y encuentra alimentos extranjeros de todo tipo, pero abre la economía rural y encuentra pobreza made in Colombia, eso no puede seguir siendo”, enfatizó el Ministro.
Otra preocupación de Iragorri es la importación de pescados y la falta de dinámica en los ríos y en las represas, sin dejar de lado la pesca marítima.
Como lo reveló en este medio en días pasados, el ministro de Agricultura ratificó que el Incoder tiene sus días contados porque el ejecutivo tiene casi lista su transformación