Miércoles, 07 Junio 2023 00:47

Fenómeno de El Niño podría afectar productividad palmera: Cenipalma

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El centro de investigación afirmó que deben tomarse todas las precauciones y llevar a cabo un adecuado manejo del agua. Con el verano, advirtió, no se puede bajar la guardia por la aparición de plagas.

Sin duda alguna el sector palmero cerró un 2022 con elevada productividad ya que fueron visibles los aumentos en obtención de fruta, aceite y demás derivados de la palma en todo el país. Según informó la Corporación Centro de Investigación en Palma de Aceite, Cenipalma que aclaró que lamentablemente la única zona que no logró consolidar productividad en el periodo anterior fue la región oriental.

En el marco del Gran Taller, Alto Oleico, previo al 51 Congreso Palmero que ya se palpita en la ciudad de Barranquilla, en donde se detalló sobre los avances en el proceso de sembrar híbrido OxG, el Director General de Cenipalma Alexandre Patrick Cooman le dijo a Diariolaeconomia.com, que sin duda se prevé que para el segundo semestre del año podría darse una sequía, producto del fenómeno de El Niño que afectaría con más intensidad la zona norte del país la misma que hoy tiene un estrés hídrico importante.

Ante la llegada del fuerte verano, Alexandre Cooman sostuvo que, desde la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma, y Cenipalma, se busca a corto plazo llevar unos mensajes en donde los productores logren eficiencia en el manejo del agua, un primer paso, en vista que las reservas hídricas que se tengan en reserva para riego deben ser aplicadas de la mejor manera posible, entendiendo que es muy difícil hacer un cambio en poco tiempo a sistemas presurizados, pero igual, expresó que en otros métodos, es urgente alcanzar la máxima eficiencia, a la vez, recomendó el Director General de Cenipalma, el agricultor debe acudir a prácticas agronómicas que ayuden a disminuir el efecto como lo es el uso de biomasa en el plato de la palma y el manejo de las especies silvestres o arvenses que resultan útiles por cuanto hacen que haya menos evaporación de agua del suelo, prácticas que suman pues conllevan a que el agua sea mejor aprovechada por los cultivos de palma.

A criterio de Cooman con el verano vienen grandes amenazas fitosanitarias, motivo de peso para revisar con el mayor celo las plantaciones en tiempos de sequía porque generalmente con sol intenso hay más problemas con plagas, en palma y en otros cultivos, generalmente insectos que encuentran un entorno ideal para proliferar, una amenaza que conmina al labriego a extremar la vigilancia como también a intensificar la aplicación de un manejo integrado en donde se presuma alto riesgo como consecuencia del desarrollo de las plagas.

En materia de producción y eventual daño, Cooman explicó que la cosecha venía definida desde hace dos años por la buena cantidad de fluorescencia, empero, recomendó cuidar los racimos que vienen y ver de qué manera se pueden tener bien fertilizados e insistió que el punto es clave porque en tiempos de baja pluviosidad hay que tener muy claras las ventanas de aplicación de abonos y así aprovechar el momento sobre la base de una previsión en el suministro de nutrientes y tener alguna flexibilidad en poder entregarlo a la palma, no necesariamente en la época habitual, pero sí poder cumplir con ese plan de fertilización ya que define el tamaño y el peso de los racimos que se puedan cosechar.

 

 

Detalló que con el riego se previene un estrés elevado para palma que también puede redundar en una disminución de producción en un par de años.

El clima, razonó el Director General de Cenipalma, es una de las grandes incertidumbres que manejan los agricultores. En los campos experimentales de Cenipalma, expresó Cooman, se han visto unos años muy benévolos, tiempos de niña con buena repartición hídrica en las diferentes regiones colombianas lo que puede llevar a que los palmicultores estén un poco relajados y no con todos alerta frente a lo que se viene con el fenómeno de El Niño, luego hay boletines e información en la publicación El Palmicultor, órgano informativo de Fedepalma, sobre las acciones que pueden tomar los agricultores en el actual momento para blindarse frente a la sequía esperada en el segundo semestre.

 

Cultivos van bien, pero sigue lucha contra la PC en Magdalena

El directivo indició que actualmente se sigue enfrentando la explosión epidémica que está viviendo el departamento del Magdalena alrededor de la Pudrición de Cogollo más conocida como PC, empero reconoció igualmente que también se ve un avance demasiado importante en la renovación productiva. Manifestó que tal y como van las cosas, este año podría haber aproximadamente 11.000 hectáreas sembradas con los híbridos interespecíficos en esa zona, un avance que genera alivio y regocijo en el sector puesto que hay progreso trascendental en la renovación del área para hacerla nuevamente productiva.

 

 

Las demás áreas del país, apuntó Cooman, también tienen sus problemas fitosanitarios ya conocidos como es el caso de la zona oriental y otros puntos de la geografía, pero sin las condiciones tan críticas como las que experimenta el Magdalena en este momento. Cabe anotar, agregó el ingeniero agrícola, que la Marchitez Letal. ML, que es la enfermedad más importante en el oriente colombiano, ha visto por quinto año consecutivo una disminución de los casos lo que significa que hay un control efectivo que se logra a partir de la gestión entre las empresas del sector, las autoridades y Cenipalma, buscando una contundencia en el manejo de dicha perturbación que tiene origen en el hemíptero Myndus crudus, insecto chupador también llamado “salta hojas de palma”.

Colombia tiene sembradas con palma de aceite cerca de 600.000 hectáreas distribuidas en cuatro zonas palmeras demostrando que es el sector agrícola que más ha crecido en los últimos diez años. Las ventas totales, dijo el vocero, alcanzaron los 1,7 millones de toneladas, un repunte sugestivo que mostró 78.000 toneladas por encima de las registradas en 2021 y un crecimiento total del 4,6 por ciento.

El país palmero le vendió al mercado local el 74 por ciento de su producción y el 26 por ciento a clientes del mercado internacional.

En opinión de Cooman, más allá de las cifras, Cenipalma lo que busca con todo compromiso es llevar a cabo las mejores prácticas, alta eficiencia y unos crecientes indicadores de sostenibilidad razón por la cual todas las acciones van dirigidas a una condición de plantaciones más productivas, con mejores rendimientos y con los más óptimos impactos ambientales, así como sociales.

 

“Tanto en la renovación productiva que se ve en la zona norte como en plantaciones en donde se persigue ampliar áreas, el mensaje nuestro siempre será en ese sentido, planificar bien los cultivos desde el principio, organizar los procesos, asegurar el financiamiento necesario para tener un manejo técnico óptimo y por esa vía asegurar unas plantaciones exitosas”, declaró el señor Cooman.

 

Cenipalma sigue dedicando tiempo para que los palmeros estén tranquilos porque hay investigación y demasiado adeudo. El centro de investigación no para y por eso trabaja en cultivares resistentes a la Pudrición de Cogollo, logrados en su máxima expresión con los híbridos interespecíficos que no los invento Cenipalma, pero que contribuyó con la tecnología para hacer de estos varietales altamente productivos en donde la cereza del pastel fue el desarrollo de la polinización artificial con ANA, hoy comúnmente aplicado y método afortunado en vista que disparó las tasas de extracción, asegurando la recuperación de racimos en plantación. La polinización artificial para la inducción de frutos sin nuez en híbridos interespecíficos OxG haciendo uso del regulador de crecimiento ácido 1-naftalenacético, ANA, se consolidó como la alternativa de fecundación asistida que necesitan los cultivares.

 

 

Como si fuera poco, Cenipalma trabaja fuertemente en mejoramiento genético, es decir no está concentrado solamente en híbridos interespecíficos sino también en la búsqueda de resistencia en las plantas seleccionadas artificialmente por múltiples métodos, iniciando desde un cultivo más variable tal y como se hace con los cultivares guineensis.

En este momento, apunto Cooman, hay un avance en el sentido que existen pruebas de valoración agronómica en costo, de semillas que están siendo ensayadas en diferentes plantaciones a nivel nacional, sembradíos en zona y subzona parta tener la mejor selección y genética para el futuro.

 

“El mensaje del Congreso es claro, porque el sector palmero es próspero, genera un impacto positivo entre palmicultores y sociedad, pero también desafíos y necesidades a futuro por lo que tiene que ver como aprovecha las oportunidades y como se prepara para los próximos tiempos en todo sentido. De parte de Cenipalma, obviamente están los componentes técnicos y tecnológicos en los que se debe trabajar, tenemos que seguir investigando y lograr encontrar en el largo plazo, unas soluciones que le permitan a los productores ser cada vez más competitivos a nivel mundial”, aseveró Alexandre Cooman.

 

Palma y ecología van de la mano

Los palmeros colombianos, conscientes de la importancia de las especies de flora y fauna para la vida han decidido jugársela por el medio ambiente pues corroboraron que el sector primario puede convivir con árboles, plantas y animales silvestres que piden su preservación ante la inminente amenaza. Por ello se han fomentado corredores biológicos para el jaguar y otras familias del reino animal, unos mecanismos que han arrojado los mejores resultados.

 

 

Recalcó que en las plantaciones palmeras se promueven con mucho empeño las llamadas calles de palera es decir por donde no hay tránsito o actividad de cosecha, unos lugares ideales para que crezcan arvenses nativos y característicos de las diferentes zonas, acompañados de nectaríferas o plantas que desarrollan flores, de mucho interés para los insectos.

 

“A partir de ello viene una cadena de bichos y animales que se albergan en esas áreas, dentro de la plantación, pero igualmente en las zonas aledañas, es así como buscamos que el diseño de una finca defina las áreas de conservación, así como las de producción que estarán conectadas a través de corredores biológicos. Es necesario adelantar de manera paralela un plan de manejo en esos predios junto con el inventario de especies con alto valor de conservación”, precisó Alexandre Patrick Cooman.

 

Los precios ayudan e incentivan

 

 

Cenipalma y los productores han observado en el último año unos precios altos y adecuados en buena medida para lo que es el aceite de palma y el mensaje con este escenario es reinvertir en mejores en la plantación. De todas maneras, los productores saben que las cotizaciones del aceite de palma están sujeto a las diversas coyunturas por lo que no hay valores óptimos a lo largo de todo el ciclo del cultivo de la palma, un motivo más que suficiente para que en los momentos de vacas gordas se pueda hacer esa reinversión lo que incluye mantenimiento y fertilización, todo buscando un blindaje para los momentos lánguidos.

Con la palma de aceite, prosperan muchos, en principio un cultivo juicioso, la agroindustria, los trabajadores, los sectores cercanos como el transporte, el comercio y las familia palmera, el reflejo de la misión de Fedepalma y de Cenipalma que adelanta un trabajo técnico-científico, pero con el propósito definido de ayudar al palmicultor puesto que está claro que la ciencia y la tecnologías tienen que estar al servicio de algo, lo que para Cenipalma significa que el trabajo debe impactar el bienestar del palmicultor y de todas las familias dedicadas a esta actividad en donde es claro que hay mejores ingresos y toda una apuesta de oportunidad, inclusión, participación y tejido social sin dejar de lado el compromiso ambiental.

 

Palma y agricultura deben propender por suelos vivos

Cenipalma consideró perentorio llevar a cabo desarrollos productivos en el campo a partir de abonos y material biológico puesto que los suelos demandan vida y el mejor estado de salud para poder seguir en el ámbito productivo.

 

 

Es claro que hay un lío ambiental y de excesos con los fertilizantes nitrogenados y otras sustancias, pero igual hay consciencia de la saturación en las tierras cultivables que empiezan a rechazar la química, aparte de todo el contexto técnico hay problemas agudos de provisión y disponibilidad de insumos agropecuarios tal y como quedó evidenciado con la crisis global logística y la guerra entre Rusia con Ucrania, sucesos que desencadenaron en desabastecimiento, altos precios y una inflación sin antecedentes en el mundo.

Desde hace más de un año Cenipalma retomó un programa de investigación de microbiología de suelo, un tema que se tuvo desde hace un tiempo, pero que por dificultad económica debió congelarse unos años. En ese proyecto, especificó Cooman justamente se vienen desarrollando tecnologías para el uso de microorganismos, solubilizadores de fósforo y fijadores de nitrógeno para la palmicultura, es un trabajo de largo aliento donde en una primera fase hay que recorrer el país y hacer una labor de muestreo bastante amplia e ir poco a poco evolucionando hacia la identificación de posibles microorganismos que pueden estar aportando de manera positiva, unos menesteres en laboratorio que conllevarán a purificarlos, identificarlos y hacer el trabajo genético que actualmente se hace con los microbios, bacterias, hongos, actinomicetos y protozoos de los suelos antes de poderlos liberar.

Hablando de suelos vivos, todo lo anterior, acentuó el Director General de Cenipalma, tiene que sumar y encajar en la ecuación de una alta eficiencia pues si bien se busca validez, igual habrá que seguir con los fertilizantes porque al medir las necesidades, el suelo demanda fósforo, potasio y nitrógeno por cada tonelada de aceite producido, un indicador que muestra cómo se puede avanzar en un sector cada vez más eficaz en cuanto al aprovechamiento de los recursos naturales.

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