Sin duda la hermosa y promisoria Bogotá es una ciudad de encanto, cultura, pasiones y oportunidades, es la capital colombiana un lugar en donde converge el país y en donde todos caben. Para muchos el sueño inicial no es el americano sino precisamente el bogotano puesto que de distintas poblaciones del país han llegado millones de personas que encontraron trabajo, la opción de un negocio y la manera cómoda de educar hijos. Bogotá, conocida con varios remoquetes es la “nevera” amable, la Atenas Suramericana, la Ciudad de las Puertas Abiertas, la Capital Mundial del Teatro, la Ciudad de Todos, la “Muy Noble y muy Leal”, como se le diga es la enorme Bogotá la urbe que se disfruta de muchísimas maneras, pero nada más sinigual que apreciarla al sabor de una buena taza de café.
Esta capital fundada el seis de agosto de 1538 está cargada de desarrollo y modernidad, sin embargo, son enamoradores los vetustos balcones de la Candelaria, el barrio fantasmal y cuna de poetas, políticos, escritores e ilustres. Aún se nota la huella de la ciudad añeja, todavía sobresalen los brillantes rieles del tranvía y en las noches dicen algunos, se escuchan los gritos de la loca Margarita, icono liberal, los pasos de Pomponio y los aterradores saltos del Virrey Sámano. No se borra la fatídica tarde del “Bogotazo” y sus iglesias y grandes casonas con techos en teja de barro murmuran bajo espesos helechos secretos y cuentos que lograron inmortalizarse.
También encanta Usaquén, sus casas enormes, sus balcones y su arquitectura, todo un encuentro de dos épocas, la muy antigua y los edificios de construcciones vanguardistas en donde habitan personas de muy buen nivel económico. Es Bogotá un poema, una oda retrospectiva entre nubes grises o soles intensos, es la ciudad, un lugar ideal para vivir y sacar lo mejor de la existencia, pero insisto disfrutando de su tremendo gourmet y una taza de café especial en la mano, extasiado con cerros tutelares, prolongación de la cordillera oriental en donde se iza la iglesia en el cerro de Monserrate, lugar perfecto para devorar metrópoli y evocar los tiempos precolombinos en tiempos de Bacatá y su admirable Nación Muisca, la que gobernó y dejó vestigios que hoy siguen presentes en algunos hogares en donde la sangre Chibcha ni se pierde ni se niega.
Una de las particularidades de Bogotá es que cuenta con lugares espectaculares para caminar, almorzar, refrescar el paladar o tomar café diferenciado, hoy la capital afianzó una tendencia en sus ciudadanos y es el consumo de muy buen café, atrás quedaron las viejas grecas, las olletas o los tiestos para colar café, hoy se piden métodos de filtrado y preparación de café en la variedad que se quiera, Borbón Rosado, Borbón Rojo, Geisha, Caturra, Tabi, ombligón, Variedad Colombia, Castillo, Típica, Maragogipe o el que se antoje, incluidos los mejores Blend, Bogotá absorbe café de todo el país, empezando por Cundinamarca, empero llega grano especial del Tolima, Huila, Eje Cafetero, Santander, Norte de Santander, Boyacá, Sierra Nevada, Guajira, Cauca, Nariño, Antioquia o de las montañas orientales en Casanare, grano suave de Tamara. En fin, en Bogotá se toma el mejor café y su consumo se consolidó como una inmejorable experiencia a cualquier hora del día o la noche.
Un sitio estupendo y hecho a la medida de un bebestible especial es Café Antagónico Bistró, término francés que significa pequeño restaurante, pero que, con sus diversos ingredientes y sabores opuestos o contrarios, ayudan a complementar platos de verdadera calidad, algo que igual sucede con el café del lugar en donde hay variedad, fragancia, sabor y confort. Un ejemplo es preparar un chocolate y adicionarle algo de sal, una serie de mezclas que entregan unos sabores mucho más balanceados en comidas y bebidas.
En diálogo con Diariolaeconomia.com, el Gerente de Café Antagónico Bistró Alejandro Sierra anotó que el lugar ofrece cafés de especialidad con diferentes procesos, unos con ósmosis o movimiento de agua a través de una membrana semipermeable en donde se sumergen las frutas con el café logrando unas moléculas aromáticas mucho más complejas que le dan finalmente mucha más esencia a la persona cuando está degustando el café.
Hay para el tema café otros procesos innovadores como métodos de filtrado que hacen de la hora del café, el mejor momento del día porque quien lo toma en Antagónico Bistró, experimenta las mejores sensaciones en un lugar muy bien acondicionado que invita a pasar mañanas, tardes o noches con cafetos y variedades de café suave colombiano logradas para darle sentido a la vida.
El negocio lleva tres años en el norte de Bogotá más exactamente en la carrera 17 A # 122-27, una empresa relativamente nueva que llegó al mercado gourmet con mucha fuerza y con una propuesta distinta con el fin de marcar diferencias, aprovechando lo mejor del campo y de los sabores antagónicos.
El tema del café no es fortuito ya que el café que se toma en Antagónico Bistró viene de una escuela de Australia en donde hace ocho o diez años Alejandro trabajó con la bebida notando que en ese país aprecian de gran manera el café de especialidad, una privación inexplicable en Colombia en donde se cultiva y se cosecha el mejor café del mundo, un consumo que empezó a cambiar de tendencia y en donde se observa que la bola se está agrandando.
“Qué bueno aportar un granito de arena para mejorar el consumo y hacer del café una cultura, una identidad y un producto emblemático, algo que no ha sido en vano porque con el trabajo hecho la gente ya está pidiendo café de especialidad y eso no es raro porque aquí tenemos muy buenos cafés diferenciados listos para compartir y ratificar en torno a una taza amores, amistades o negocios y sacar lo mejor de nuestra caficultura que apostó por valor agregado”, declaró el señor Alejandro Sierra.
La gente tomó consciencia del café que toma y por ello no quiere saber de cafés industrializados en donde hay pasillas entre tostadas y quemadas, hoy apuntó el empresario, el colombiano sabe de qué tierra es y pide lo mejor de ella, café especial en distintas variedades sin importar el valor porque los que saben del grano distinto van dispuestos a pagar por un café de verdad, por una bebida deliciosa y de experiencia en donde la salud es otro común denominador.
Un tema innegable es que cuando la gente coge el gusto por el café de especialidad difícilmente recibe otro porque las diferencias en paladar son bien distintas, una experiencia que llega para quedarse con el beneplácito que al consumir café colombiano de especialidad se le está haciendo el gasto al país, al productor colombiano y no a quienes cosechan pasillas o cafés de cuestionable calidad, como se ha dicho hasta el cansancio, “lo de mi tierra primero” y si es el mejor con mayor razón.
Generalmente hay negocios que venden un café económico o posiblemente costoso que llega con una sobretostión para ocultar todas las imperfecciones, con café especial es casi imposible que el paladar aguante un café de esos, la vara queda muy alta con café de especialidad.
Muchos productores han notado que es mucho más rentable apuntar al valor agregado que al commoditie pues en volumen el precio lo pone un mercado que generalmente no sabe de café en tanto que una bebida de especialidad tiene el valor que la calidad impone. El asunto es seguir con buenas prácticas agrícolas, buenos beneficios y la obtención de cafés de enormes atributos en donde la variedad se vuelve la mejor opción en un mercado que compra sabores, fragancias y calidades diferentes.
Café Antagónico Bistró está haciendo unos filtrados en frío que también permite tener esos aromas presentes al igual que unos sabores que se sienten muy fácilmente y se pueden percibir de manera única en el paladar, luego sí es importante ofrecer variedad y valor añadido, haciendo unos muy buenos procesos.
Ir a Antagónico Bistró resulta un plan espectacular porque se toma el café que uno quiere o sencillamente observa la carta de posibilidades y se da cuenta que hay un mundo de aromas y sabores que son imperdibles. En café, el lugar ofrece diversos métodos de filtrado desde Chemex, V60, prensa, sifón, café frío y unas variedades que guarda el acogedor sitio con todo cuidado, Geisha, Borbón Naranja, Borbón Rojo, y granos con procesos de sandía, de Lychee, métodos con ósmosis, en inmersión con secado ultravioleta y distintas técnicas, algunas complejas, pero con resultados sorprendentes.
En otro método hay café al que se le agrega un hongo famoso en oriente, el koji o Aspergillus oryzae, el que se ha utilizado por siglos considerablemente en el sudeste asiático, posiblemente con mayor notoriedad en Japón en donde resulta vital para obtener sake, amazake, miso y otros productos umamis, este ingrediente se conoce como el moho nacional de Japón.
En café el umami o glutamato de monosódico es uno de los cinco sabores básicos que incorporan dulce, ácido, salado y amargo. En Japón umami traduce delicioso sabor salado. De todas maneras, la bebida de café con umami implica un proceso complejo que permiten tener nuevas experiencias con los diferentes tipos de café.
De muchos países están llegando consumidores de café buscando nuevos sabores y verdaderas alternativas, es el caso de Café Antagónico Bistró en donde se tiene un público objetivo de extranjeros que gustan de experimentar o explorar diferentes perfiles de café, una tendencia que crece exponencialmente en Colombia en donde la gente pide café de calidad, un camino más que interesante en el negocio de los cafés de especialidad.
Los que saben de café como es el caso de Alejandro Sierra, dicen que la tostión media es ideal por sabores y salud. Las tostiones altas, dicen estudios adelantados, están relacionadas con problemas cancerígenos, razón por la cual lo mejor es tomar cafés adecuados, que impliquen un gusto para quienes aman la bebida proveniente de cafetos y tranquilidad por los temas de salud.
Está dicho que las pasillas sean de donde sean son un problema para el organismo porque están relacionadas con el desarrollo del cáncer, un tema que se une a la acrilamida un genotóxico que suele exacerbarse con tostiones demasiados fuertes. El asunto es elegir el mejor café y no fijarse en costos ya que la diferencia entre un café de calidad y uno de alto riesgo es mínima. Para el caso de Antagónico hay cafés de especialidad y de máquina expreso que reportan mediciones en taza hasta de 88 puntos, un café de muy buenas características por 7.000 u 8.000 pesos, nada por tomar café sumamente bueno y amigo de la salud, como dicen muchos, lo barato sale caro y en este caso un café especial no tiene un precio desproporcionado, es totalmente accesible al público.
Los cafés de Antagónico vienen del Eje Cafetero en donde se siembra a una altura de 1.600 metros, un producto que después de una selección llega con todas las mejores características de las fincas de la zona cafetera, destino y anhelo de la Colonización Antioqueña. Muy pronto habrá café del Huila y Nariño por ser granos los producidos en esas tierras con todo el potencial en cuerpo, aroma y sabor.
“La verdad, aquí en Colombia se producen unos cafés espectaculares en distintas zonas, desde la costa Norte hasta las tierras fértiles y bellas del sur. Aprovecho este espacio para invitar a la gente de Colombia y de fuera del país a que visite Antagónico, un sitio cordial para pasar momentos en familia, cerrar negocios o darse un gusto después de una ardua jornada laboral”, señaló Alejandro Sierra.
Al lugar llegan japoneses, estadounidenses, italianos, ingleses, franceses, australianos y rusos, un público extranjero interesante que llega al lugar y lo elige como favorito. Antagónico es como otros negocios de café especial y gourmet una pequeña embajada en donde se vende café grande en calidad, en opciones y gama de fragancias y sabores.
“Hace poco vi un mensaje de un caficultor, decía que en este momento nos estamos dando el lujo de tomarnos un café que se lo tomaba la reina Isabel hace unos años porque todo el grano se exportaba y hoy se tiene la oportunidad de acceder al mejor café porque el mercado ha crecido y por eso lo mejor es disfrutar del café colombiano de especialidad, el mejor café que sabe bien frío, caliente, en diversas presentaciones y con licor, grano de excelencia para todos los gustos”, expresó el Gerente de Antagónico.
Es tan de buena calidad el café de este acogedor lugar que hasta el equipo de trabajo adquiere su café de especialidad porque después de tomar calidad es imposible retomar los cafés que se ofertan por la industria en los supermercados, el paladar de los colaboradores se acostumbró a un muy buen café.
Café Antagónico Bistró cuenta con un personal muy profesional, en el lugar hay Baristas demasiado buenos y el sitio es un centro de conocimiento en donde se le da el mejor recibo al valor agregado, un lugar especializado que ofrece técnicas.
El café es una experiencia tan grata que inclusive hay americanos, alemanes, japoneses y personas extranjeras metidas en los cultivos de café, entornos que no cambian razón por la que decidieron apostar por el querendón cultivo. Otras personas rusas y de otras latitudes entraron al negocio con tiendas y recorren el país cafetero aprendiendo del grano y comprando los mejores granos.
La ventaja es que Colombia tiene todas las condiciones y el producto para experimentar éxito en toda la cadena cafetera, un sector que se les metió a muchos extranjeros en el corazón y que hoy los hace sentir muy colombianos.
Para el experto, hay en el país muy buenos suelos y la técnica de la se adolecía fue llegando para expresarla en valor agregado que es lo que finalmente hacen en el mundo con otros bienes de la ruralidad, muchos se salieron de la materia prima y aprendieron a añadir valor para mejorar las ventas y con ello su calidad de vida.
Sin duda, y viendo tantos extranjeros hay que decir que con el café el sueño americano se convirtió en el sueño colombiano, el de paisajes espectaculares, cordilleras imponentes, pueblos coloridos y sonrisas recurrentes en cada campesino. Es increíble, anotó Alejandro, pero el extranjero que llega a Colombia generalmente se queda, sencillamente el café enamora.
El café americano se toma por tan solo 7.500 pesos, igual café de especialidad de 400 ml, dos tazas y la experiencia por 22.000 pesos, un lujo de bajo costo por tratarse de café con conocimiento. La media libra de café se lleva a casa por la módica suma de 65.000 y hasta 100.000 pesos, precio muy cómodo teniendo en cuenta que incluye variedades, calidades y procesos que llevan los granos tipo Geisha, Borbón o Java por citar algunos.
Fue grato pasar una tarde bogotana de sol en un sitio que invita a volver, negocio placentero y hospitalario con muchos productos y café diferente, pero lo más importante con la amabilidad y la atención de quienes ponen en la mesa lo mejor de lo mejor, todo acompañado de una sonrisa que ilumina espíritus exclusivos, los que piden café de especialidad en Antagónico Bistró. Sin exagerar, sensacional.