Según el acuerdo gubernativo 303-2015, publicado en el Diario Oficial, el salario mínimo se incrementará un 4 % para los trabajadores del sector agrícola y no agrícola, y un 3,5 % para los del sector de exportaciones y maquila.

Esto significa que los primeros pasarán de devengar 2.394 quetzales (unos 312 dólares) a 2.456 quetzales (unos 321 dólares), mientras que los segundos pasarán de cobrar 2.200 quetzales (287 dólares) a 2.246 quetzales (293 dólares).

A cada uno de los grupos hay que sumar un bonificación mensual de 250 quetzales (unos 32 dólares), establecidos por ley.

Según el acuerdo, esta norma empezará a regir el 1 de enero de 2016.

Guatemala tiene una población aproximada de 16 millones de habitantes, de los cuales aproximadamente la mitad es económicamente activa, según registros oficiales.

Sin embargo, solamente unos 1,9 millones de guatemaltecos están afiliados a la seguridad social, mientras el resto trabaja en el mercado informal.

El porcentaje de aumento sugerido por diversas organizaciones y entidades para 2016 fue del 5 %, pero el presidente,

Alejandro Maldonado, advirtió ayer de que esa cantidad sufrió "ajustes" para cumplir con dos preceptos: ser superior al costo de vida y estimulante para crear empleos.

Según declaró el martes el presidente, para tomar la decisión se tomó en cuenta el "incremento del coste de vida" y el índice de pobreza que sufre el país.

Según la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (Econvi 2014), publicada el pasado 10 de diciembre, el índice de pobreza extrema de Guatemala aumentó en 7,6 puntos porcentuales respecto al año 2006, por lo que el 23,4 % de la población naufraga en esta situación.

En Guatemala, vivir en una situación de pobreza extrema, según las mediciones de la encuesta Encovi 2014, significa contar solo con 5.750 quetzales al año (754,4 dólares), mientras que hacerlo en pobreza no extrema implica unos ingresos mínimos de 10.210 quetzales (1.339 dólares) al año.

El documento, que recoge datos del año pasado, encontró que un 59,3 % de la población guatemalteca vive por debajo de la línea de pobreza, mientras en 2006 se determinó este valor en un 51,2 % de la población y en un 56,4 % en el año 2000.

Otro de los objetivos de esta alza, de acuerdo a Maldonado, es "estimular" la existencia de fuentes de trabajo.

"La pobreza es desempleo y si no creamos condiciones que estimulen la creación de empleos pues se daría la paradoja de que unos comen y otros no", aclaró el presidente, que apostó por encontrar un "equilibrio".

En el año 2014, el salario experimentó un crecimiento del 5 % para el vigente período. EFE