Para todos es bien sabido que los aspectos geopolíticos históricamente han causado desmedro en la dinámica comercial habida cuenta que se afectan los temas logísticos castigando tarifas y precios finales al consumidor que es quien termina pagando los platos rotos.
La pandemia de Covid-19 dejó una estela de muerte y crisis puesto que con ella vino la crisis global logística que afectó el suministro de bienes, haciendo que por un flete de China a Buenaventura se pagarán más de 18.000 dólares, un inconveniente de marca mayor porque vino la dificultad con las entregas en vista que por falta de componentes muchos bienes de capital tuvieron que esperar para ser despachados, el asunto puso a temblar el mundo porque faltaron medicamentos, alimentos, fertilizantes, repuestos y muchos bienes y materias primas esenciales, un apuro que se agravó con el choque entre Rusia y Ucrania, es decir la cereza del pastel.
De todas maneras, como lo hemos repetido, el globo venía mal, las economías empezaban a mostrar números en rojo y la guerra comercial entre Estados Unidos y China desestabilizó algunas regiones pues el planeta en su totalidad acude a las dos potencias de gran relieve por sus sólidas economías, poder político y capacidad de suministro, claro está que allí China aventajó al país norteamericano por ser una realidad económica en boga, un gran proveedor y desde luego por no tener los saldos en rojo que hoy amenazan la estabilidad económica del país del Tío Sam.
Hoy el entorno es extraño, el mundo no está cómodo y el nuevo escenario de crisis avinagra las expectativas de inflación, con mayores fletes, más altos serán los precios de los bienes importados y eso como se sabe lo termina pagando el público. Hay vientos de guerra, dificultades por todo lado y un entorno gris que no permite avizorar buenos tiempos en el corto o mediano plazo.
El presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior, Analdex, Javier Díaz Molina anotó que los datos que maneja son alarmantes pues los fletes están subiendo de manera extraordinaria a razón de 7.000 dólares, cuando hubo calma puesto que las tarifas estaban en niveles de 1.500 dólares, una realidad difícil de asimilar, pero consecuente con el avispero geopolítico, sencillamente en el mundo se alborotó el cotarro.
En materia económica y trayendo a colación la teoría del filósofo libanés Nassim Nicholas Taleb, hoy no estamos frente a un escenario de cisnes negros, nada es sorpresivo, de hecho, los mercados y los sectores se venían preparando, hoy vuelan buitres negros, murciélagos y todo lo que representa el caos, un contexto que invita a las potencias a mirar como arreglan sus diferencias porque caso opuesto el mundo podría tener los días contados. Qué situación tan apremiante, es urgente dejar los señalamientos y corregir en buenos términos pues el manto está pasando de gris a un tono lóbrego que hace prever un devenir con visos de hecatombe. Dios quiera, entremos en razón, le pongamos punto final a las polarizaciones y con amabilidad y esperanza poder abordar los temas urgentes que tienen que ver con economía, productividad, cambio climático, estrategias, globalización y multilateralidad activa y al servicio del crecimiento, como diría mi abuelita Flor Ángela, el palo no está para cucharas.
Hay también correcciones pendientes, las economías más grandes no crecen, siguen los aprietos fiscales y de manera increíble el país más sancionado del mundo, Rusia, crece de manera importante, sus castigadores tienen indicadores de vergüenza, apenas 1,3 por ciento en el primer trimestre de 2024, una cifra que se revisó a la baja pues la expectativa del mercado era de un repunte de 1.6 por ciento.
Los temas globales ya impactan los ejercicios económicos de las distintas corporaciones porque un ítem de competitividad es el valor del flete y si este sube altera toda la perspectiva trazada, peor que un borracho pendenciero en la fiesta.
En charla con Diariolaeconomia.com, el Gerente Comercial Nacional de Magma Colombia DFAC DONGFENG Miguel Zamudio expuso que, si bien hay un gran lío, es mejor verlo de la mejor manera y seguir trabajando. Anotó que en este momento hay una nueva crisis con contenedores para traer los vehículos desde China pues los fletes pasaron de 1.200 y 1.500 dólares a niveles de 7.000 dólares para mercancías consideradas normales, pero se cree que pueden pasar de 14.000 y 15.000 dólares, un tema coyuntural que unido a todo lo que pasa en el país no ayuda en el frente de precios, pero insistió que aun así es importante hacer la tarea y de la mejor forma para poder sacar adelante el proyecto.
Informó que el grupo importa algunos vehículos con unos fletes establecidos en la categoría Flat Rack, unos contenedores adecuados para transportar carga pesada, pero también para mercancías o bienes que demandan un manejo especial dadas sus dimensiones y allí entran tubos y maquinaria. En este tipo de flete ingresan los automóviles eléctricos considerados bienes peligrosos pueden alcanzar en precio los 14.000 y 15.000 dólares. Reveló que este viernes una naviera confirmó unas cotizaciones que llegaron a 21.000 dólares para llevar a puertos colombianos ese tipo carro.
“Para nosotros si es muy delicado tener estos precios de contenedores como tal debido al alza tan abrupta que hemos tenido de un mes a otro, es alarmante y sin duda impacta la operación”, comentó el también experto en movilidad sostenible.
Los altos precios, dijo, son la consecuencia de las tensiones bélicas que hay actualmente en el mundo y que deben meterse en cintura porque nos favorables para nadie. Es perentorio mejorar el tema porque sin duda alguna las empresas seguirán teniendo intervalos en donde habrá picos de escasez en este momento desde el transporte y lo deseable es que ese entorno de guerra baje para que se calmen las aguas y facilitar el trabajo de todos los sectores que anhelan trabajar de una manera mucho más equitativa y más tranquila.
Esa presión y la amenaza de guerra, explicó el directivo, genera una crisis mundial que se padecerá en todo el globo porque bien es cierto que allá en el lugar de la guerra se sufre primero, luego los países de América Latina y de otras latitudes lo sentirán después con unos tremendos coletazos que afectarán los mercados y a las diferentes empresas y sectores productivos.
Algunos sostienen que en medio de las grandes dificultades florecen las más grandes oportunidades y por eso la coyuntura que tiene a todo el mundo pensativo, a más de uno quebrado y a otro tanto saliendo de América Latina, potencia el mercado de carros chinos que se consolidan como una alternativa buena, eficiente y más económica respecto a las marcas tradicionales.
“Particularmente en este momento con nuestra marca DFAC DONGFENG vemos un potencial con esta coyuntura que está surgiendo para poder crecer dentro de Colombia, entonces yo siento que aunque el mercado está complicado, para nadie es un secreto, si es una oportunidad grande de negocio que vimos y por eso Magma entra al país a meterse con todas las tecnologías, diésel, gas natural, vehículos eléctricos de una manera más fuerte y arrolladora que no han hecho las marcas de prestigio con un recorrido extenso y amplio en el territorio colombiano, esa opción sí que la estamos viendo”, señaló Miguel Zamudio.
En medio de la incertidumbre el grupo cree en Colombia
En otro frente Zamudio dijo que Magma Colombia es una empresa con cinco años de presencia en Colombia, pero destacó que la firma lleva 18 años en el mercado Latinoamericano. En este momento, dijo, con la división de automóviles el grupo empezó desde el año pasado la comercialización, oficialmente desde octubre de 2023.
Sobre la posibilidad de lanzar automóviles y camionetas, Zamudio dijo que la firma está esperando lanzar algo en el Auto Show 2024 en Nueva York, el abrebocas para arrancar con automóviles de tecnologías limpias, tipo HB20 todo enfocado a ese tipo de solución parta ventas ya al por mayor y al cliente final a partir del primer trimestre de 2025, el tema es poner en vitrina tecnologías híbridas y amigas con el medio ambiente.
Un punto que llama poderosamente la atención es que en el área Andina y en el Cono Sur los carros que se están imponiendo en gama alta son automotores chinos, una fuerza tan grande que hay países que ya contabilizan un 50 por ciento de coches fabricados en China del total del parque automotor. En Colombia por temas arancelarios, explicó, es un poco más complicado, pero por el asunto de las tecnologías limpias se puede entrar con precios ganadores alcanzados inclusive aranceles más bajos para tener precios más accesibles para los clientes como tal.
Este año el grupo aspira a poner en el mercado colombiano alrededor de 1.200 unidades de vehículos comerciales y podrían ser más por el comportamiento de algunos sectores que son promisorios.
“En términos de flotas efectivamente podría decirse que se ve ese crecimiento de ventas como tal de vehículos. El uno a uno que es el retail que es lo que nos compone el 70 por ciento de las ventas en todas las marcas de vehículos comerciales es donde está un poco complicado, la inestabilidad del país no le genera confianza al transportador y eso hace que el mercado esté un poco lento. Nosotros estamos en un buen momento porque otras marcas están dejando de ser tan competitivas actualmente y es allí en donde nosotros entramos a conquistar. Para nadie es un secreto lo que está pasando con Chevrolet y con Hino que están desaparecidos del mapa”, enfatizó Zamudio.
Añadió que todos esos espacios que se van abriendo son los que el grupo Magma está cogiendo y de donde se agarra para poder hacer unidades importantes.
En materia de automóviles, opinó el directivo hay algo real y es que en donde algunos mostraron debilidad y poca fe, China llegará mostrando todo su potencial. Es algo que a criterio del vocero están demostrando las marcas chinas y asiáticas en general, que con toda seguridad lo seguirán haciendo. Dijo que para nadie es un secreto pues hoy si la gente puede ir a China podrá notar que no hay marcas europeas como Volkswagen, Renault y otras, no el asunto dio un giro impresionante y por eso en China solo se ven cantidades de marcas de vehículos chinos que no se observa en otras partes del planeta, allá las tienen todas, recalcó, y son carros impresionantes.
Subrayó que es notorio lo que están haciendo los chinos en Latinoamérica, particularmente en Colombia en donde hay un mercado de vehículos de nuevas tecnologías muy fuerte en el país lo que hace que se le abran las puertas a grupos como Magma que seguirán trabajando en esas tecnologías y entrar realmente en ese segmento.
En la década de los 70 la gente veía los carros japoneses con desconfianza y hoy todos quieren tener carros japoneses, en menos de diez años muchos en Colombia van a querer tener un carro chino de buenos rendimientos. Expuso que a la fecha el importador que no tenga una marca china se quedará por fuera de la competencia porque las marcas buenas van a estar agarradas por el resto de los competidores.
Los chinos van con todo el impulso, aparte de autos de gama alta y gran estilo, entraron fuertemente con carros utilitarios y tractocamiones, todos automotores dotados con lo mejor de la tecnología, destacados rendimientos e igualados con cualquier vehículo europeo sin ninguna duda.
Por su parte el presidente del grupo dominicano Magna Agustín Lama expresó que la situación geopolítica pesará en el mercado del automóvil que por su naturaleza siempre tiene subidas y bajadas. La situación de hoy está sin duda, dijo, afectando en lo referente a fletes que están subiendo bastante por el desvío de rutas en Medio Oriente y las dificultadas que sugiere pasar por el Canal de Suez, esa situación impactó las tarifas de transporte marítimo negativamente, pero para el CEO estos son eventos que hacen parte de los ciclos reportados en los últimos cien años, en donde aparecen contextos geopolíticos complejos que finalmente terminan resolviéndose.
Esta, anotó, es una clara muestra que las empresas, independiente del sector en que se muevan, tendrán que lidiar con circunstancias totalmente ajenas que se salen de control. Por fortuna, dijo, Colombia es un país grande que está muy bien, siempre dinámico, China por su lado es la segunda potencia mundial, luego descartó inconvenientes por aspectos geopolíticos y sus apenas obvias consecuencias inmediatas, igual el tiempo pasa y pone todo en su lugar.
“Yo no creo que las cosas pasen a mayores, cualquier conflicto que haya se debe resolver en la mesa por medio de un diálogo amable. Hoy China no está en conflicto, seguramente tiene agenda y temas por tratar con Taiwán, asuntos muy de ese gobierno, pero nada complejo que pueda escalar”, expuso.
Un conglomerado que mueve marcas
Hablar del Grupo Magna de República Dominicana, su origen, o de sus centros importantes en México y América Latina no es asuntó mínimo, este conglomerado ha hecho muy bien su tarea, consolidó un portafolio en marcas y soluciones de transporte y hoy como lo hicieran Neil Armstrong y Buzz Aldrin al bajar del Apolo 11 el 20 de julio de 1969, el conglomerado sembró su bandera en la región en donde ondea victoriosa y conquistando mercados con vehículos cargados de calidad.
Este grupo arribó a Colombia en noviembre de 2023 y no lo hizo de manera sencilla, no, desembolsaron 20 millones de dólares para un plan de expansión que contemplaba en su momento la apertura de oficinas y vitrinas en Bogotá, Antioquia, Valle del Cauca, Atlántico y los Santanderes, todas regiones con tremendo mercado y márgenes interesantes de crecimiento.
La empresa decidió comercializar marcas de mucha calidad, todas soluciones logísticas y de transporte porque decidió apostar por vehículos utilitarios, camiones y tractomulas fabricadas en China. A juicio del presidente de Magna, en Colombia Magma, el grupo tiene la gama y venta completa en Colombia de todos los productos y de una línea de vehículos, posiblemente la más amplia de automotores chinos.
Si bien el grupo fue bautizado como Magna en República Dominicana, hubo dificultades para que la marca operara con ese nombre a Colombia habida cuenta que la registró un grupo canadiense, así las cosas, surgió Magma, una designación al parecer inspirada en los potentes volcanes colombianos, mirados con respeto y recelo porque son parte del paisaje de montaña de un país lleno de retos.
En el momento y como pasa con todo ciclo económico, puntualizó el presidente del grupo dominicano Magna Agustín Lama, ahora mismo hay una caída natural en el mercado de Latinoamérica a dónde van los vehículos comerciales con mayor dinámica en ventas. A criterio del presidente de Magna, Colombia es un país que necesita vehículos comerciales de alta eficiencia para transportarse porque hay muchas montañas, pero igual llanura, ciudades de playa y valles interandinos, mucha diversidad geográfica que ponen a prueba unas marcas que pueden ayudar demasiado para llenar las necesidades del mercado.
Los coches, de diferentes marcas, están totalmente probadas para los desafíos que implica la compleja topografía de Colombia, un caso exitoso en Colombia es DONGFENG que acredita varios años en suelo colombiano con resultados perfectos en términos de calidad, desempeño y rendimientos, hoy es una marca plenamente adaptada al entorno colombiano con una excelente respuesta por parte del público. La marca lleva entre cuatro o cinco años y ha demostrado capacidad, eficiencia y una inmejorable adaptabilidad, un vehículo para transportar y facilitar el negocio del transporte en donde las utilidades por momentos se estrechan.
En su análisis estimó que muchos países, incluida Colombia, deberían contemplar el sellar un TLC con China porque las naciones de la región que ya lo hicieron han experimentado ventajas competitivas por cuanto hay carros comerciales con mejor trato impositivo, impuesto de un 15 por ciento, algo alentador frente al 35 por ciento que paga la competencia, un ejercicio que resta en rentabilidad. Una buena negociación con China podría dejar para algunos países latinoamericanos un buen reducto ya que la inteligencia no pelea con nadie.
El nuevo mercado de tractomulas producidas en China es de momento una buena decisión del grupo porque los camiones igual se han comportado de maravilla en un territorio hostil, desafiante y de tremenda variedad. Según Lama para la primera milla los tractocamiones chinos son de comprobado rendimiento porque demostraron que son ideales en largas distancias, algo vital en Colombia que es un país de tamaño considerable en donde las mercancías viajan por extensos recorridos con distintos pisos térmicos hasta llegar a los puertos, o en su caso de los muelles marítimos a las ciudades del centro del país caracterizadas por su altura y transitar complicado, allí este utilitario camión pasó la prueba y hoy lo están comprando con la mayor confianza.
El grupo comercializa con todo éxito la tractomula DFAC|DONGFENG un automotor de muy buenas características con motor Cummins y otras referencias que lo hacen ganador en el segmento de vehículos de carga pesada. Se trata, enfatizó Lama, de camiones de primera calidad con lo mejor en tecnología, un automotor espectacular en donde convergen muchos avances tecnológicos. Estos son vehículos que ya tienen 18 años en Colombia desde su primera importación.
El proyecto es hoy una realidad, DONGFENG, el fabricante de vehículos comerciales número uno en China y el segundo en el mundo, llegó a Colombia con la marca DFAC|DONGFENG acompañado de un completo portafolio de camiones, buses y vanes que suman alrededor de 34 modelos, desde MiniTrucks de 1.5 toneladas de capacidad de carga, hasta tractocamiones de 52 toneladas de peso bruto vehicular, algunos con motorización cien por ciento a gas natural vehicular (GNV), otros totalmente eléctricos.
Dicho portafolio, agrupado bajo el nombre DFAC|DONGFENG y respaldado por un importante grupo de inversionistas de la industria automotriz, es la oferta que MAGMA Automotive, perteneciente al Grupo Magna, ha venido estableciendo en ciudades colombianas como Bogotá, Medellín y Cali, donde se desarrolla gran parte de la actividad económica del país y dotadas con una avanzada infraestructura de transporte que demanda vehículos comerciales modernos y eficientes.
Cabe señalar que a lo largo del medio siglo de trayectoria del Grupo Magna, la empresa se ha consolidado como un referente que cuenta con la representación exclusiva de marcas internacionales como Hyundai, BMW, MINI, Motorrad, Kawasaki, Bajaj y Petronas. Con DFAC DONGFENG ha hecho una fuerte presencia en Costa Rica, El Salvador, Honduras y Panamá. A través de la empresa MAGMA Automotive ha entrado en los mercados de México, Colombia y Bolivia, entre otros.
“Somos conscientes de los retos actuales de la industria colombiana y por eso nuestro enfoque está en establecer una base sólida para crecer a largo plazo. Estamos aquí para apoyar la evolución de la infraestructura del país y liderar el mercado en la transición hacia vehículos comerciales más sostenibles”, afirmó el presidente de MAGMA Automotive.
Al fin y al cabo, los modelos de la marca están hechos con tecnologías limpias, pues cumplen con la normativa Euro 6, lo cual garantiza, no solo su eficiencia en términos de consumo de combustible, sino también la reducción de emisiones. Igualmente, han sido diseñados y fabricados con especificaciones técnicas de reconocidos proveedores en la industria de vehículos comerciales, tales como Motores Isuzu, Motores Cummins, Ejes DANA, transmisiones FAST EATON, entre otros, lo que los hace robustos y les confiere una gran durabilidad, condición que se traduce en una menor necesidad de mantenimiento.
Aparte de las marcas de calidad, que sin duda son las mejores, el grupo ofrece un respaldo de fábrica para que los camiones trabajen, rindan y no den problemas pues al final del día es una inversión hecha para alcanzar los mejores resultados en carretera apalancados en buenos comportamientos, ahorro y eficiencia.
La marca que maneja Hyundai en varios países ha experimentado el posicionamiento vertiginoso de los modelos asiáticos, ya no sucede como hace 25 años en donde había que hacer hasta lo imposible para convencer al comprador, pero en 2005 o 2006 la marca siguió potenciando su calidad con cambios radicales en atributo y hoy es la tercera compañía más grandes de autos en el mundo, en su charla, Agustín Lama consideró que los chinos van por la misma trayectoria y ratificó su fe y confianza en DFAC|DONGFENG porque es uno de los principales referentes y fabricantes de China y en este caso es visible que el sello como pasa con otras se está consolidando como una de las más fuertes.
“En diez años muy seguramente vamos a hablar de DFAC|DONGFENG como la marca más buscada, algo similar a lo que en su momento aconteció con Hyundai y Toyota”, puntualizó el presidente del grupo Magna Automotive.
El grupo escaló y llegó a la cumbre a fuerza de trabajo y escoger las mejores marcas para comercializar, pero además apostó por un excelente servicio al cliente, un ítem de máxima importancia para las directivas pues hay en este momento producto de comprobada calidad, pero remarcó que la diferenciación a la hora de llegar al cliente está en ofrecer el mejor servicio en transmitir confiabilidad.
El hoy de Magma es gratificante, su experiencia dijo su presidente a resultado positiva y alentadora pues el crecimiento es sostenido con 300 unidades vendidas desde su llegada en noviembre de 2023. Las marcas y el buen servicio cautivaron el gusto y la exigencia de los empresarios que buscan soluciones robustas de transporte, en donde haga convergencia la confiabilidad, eficiencia, durabilidad y economía operativa. La corporación dominicana ha llegado clientes de sectores muy dinámicos como agricultura, construcción, minería, logística y transporte de pasajeros para lo cual existen en el portafolio las más versátiles opciones en vans y buses, autos muy eficaces para el turismo o el servicio escolar.
Acolfa dice que las alzas tienen distintas causas
Finalmente, el Vicepresidente de la Asociación Colombiana de Fabricantes de Autopartes, Acolfa, Alberto Macías anotó que el comportamiento de los fletes marítimos y su eventual subida se debe a varios factores como puede ser la frecuencia de transportes que se ha disminuido porque las empresas están utilizando barcos más grandes para llenarlos y evitar tantos gastos en buques menores, es decir, haciendo la operación naviera mucho más eficiente. El otro agravante, expresó, es que los puertos colombianos no tienen la capacidad ni el calado para recibir navíos de gran tamaño.
“Se conoce o se sabe que los barcos van a Panamá o a puertos cercanos que tengan esa mayor capacidad y ahí los operadores tienen que desembarcar y volver a embarcar mercancías en buques pequeños que puedan llegar a fondeaderos o muelles colombianos, bien sea Buenaventura o Cartagena, eso pues obviamente sube fletes, encarece la operación logística por bodegaje, transportes adicionales y toda la logística que el ejercicio demanda”, precisó el señor Macías.
Otro aspecto que pesa es la demanda por la apertura de empresas y ese mayor volumen de importaciones hace que la mayor solicitud de mercancías incremente los fletes, un efecto que se va a ver y que hace prever que su valor no volverá a los registrados en pandemia, de tal manera que pueda afectar el comercio exterior, exportaciones o importaciones por mayores costos o valores exagerados.