Aunque el país se mueve en mares de incertidumbre y temor por todo el entorno internacional y las dificultades internas, el crecimiento en originaciones o nuevas cuentas abiertas así como saldos en el último año, lo cual viene acompañado de tasas de morosidad, reflejaron tendencias generalmente positivas para el mercado de crédito de consumo colombiano. Al mismo tiempo, el aumento en el otorgamiento de crédito a consumidores de mayor riesgo podría estar llevando a un leve deterioro en la calidad de la cartera de créditos de consumo. Estos hallazgos hacen parte del Informe de Tendencias de la Industria de Crédito (Industry Insights Report), al tercer trimestre de 2019, elaborado por TransUnion Colombia.
En el tercer trimestre de 2019, y por segundo período consecutivo, se observó crecimiento anual positivo en originaciones y en saldos para los principales productos de crédito. Además, durante el mismo período, las tasas de morosidad grave a nivel consumidor se mantuvieron estables o mejoraron para las principales categorías de crédito1. Sin embargo, existe la posibilidad de que un alto crecimiento en originaciones oculte aumentos en la morosidad a nivel del portafolio. Para abordar esta preocupación, TransUnion estudió la dinámica de morosidad de varios cortes de cuentas (cosechas)2. Este análisis de cosechas, reveló cierto deterioro en el comportamiento de los créditos de vivienda y créditos personales.
La demanda de crédito por parte de los consumidores sigue siendo fuerte, siendo las tarjetas de crédito y los créditos personales, que incluyen créditos de libre inversión y créditos de libranza, los de mayor crecimiento en originaciones año contra año en el segundo trimestre de 2019 tras los últimos datos de originaciones disponibles, con 17,6% y 15,8% respectivamente. Los créditos de vehículo también registraron crecimiento anual en originaciones de dos dígitos, de 11,5%. Por su parte, los nuevos créditos de vivienda también crecieron, pero a menor ritmo, 3,1% año contra año durante el último trimestre.
Los saldos promedio por consumidor aumentaron para los principales productos durante el último año, observándose el crecimiento más fuerte en créditos personales (créditos de libre inversión y libranza); en el tercer trimestre de 2019 crecieron 7,1% anual.
“A pesar de las presiones macroeconómicas como el aumento del desempleo y el aumento de la inflación, el mercado colombiano de crédito de consumo continúa creciendo. Los mayores aumentos registrados en las originaciones provienen de créditos no garantizados, que muchos consumidores usan para financiar compras más pequeñas y gastos diarios. Este crecimiento ha estado en línea con el fuerte crecimiento de las ventas minoristas durante el 2019, una tendencia económica reciente positiva” afirmó la Gerente Sénior de Investigación y Consultoría de TransUnion Colombia, Virginia Olivella.
Al mismo tiempo destacó que el fuerte aumento en los productos de crédito de consumo contrasta con el crecimiento más lento de los productos de crédito garantizados, que se utilizan para financiar la compra de viviendas y vehículos. Lo anterior, expuso, podría ser reflejo de la caída en los niveles de confianza del consumidor lo que, junto con los desafíos de acceso, pueden estar frenando la demanda por viviendas y vehículos.
Como parte del análisis Olivella, señaló “el crédito de consumo es un importante catalizador para el crecimiento de la economía y es alentador ver que las entidades todavía tienen un apetito para extender crédito al tiempo que administran el riesgo de manera efectiva y mejoran el comportamiento general de la morosidad”.
La nueva dinámica de crecimiento está en el crédito de consumo
En todas las categorías de crédito de consumo, los segmentos de mayor riesgo registraron un crecimiento anual positivo en originaciones en el último trimestre, lo que apunta a una mayor inclusión financiera y una mayor disposición de las entidades para extender el crédito a los consumidores más riesgosos.
Para tarjetas de crédito, los consumidores subprime o riesgo alto, registraron el incremento anual más alto en el segundo trimestre de 2019 (68,6%), seguido de las originaciones de consumidores near prime también conocidas como riesgo medio-alto, las cuales crecieron en 51% durante el mismo período de tiempo. Las originaciones de los segmentos prime, prime plus y súper prime (riesgo medio, medio-bajo y bajo, respectivamente) registraron tasas de crecimiento anuales de 18,5%, 7,7% y 0,7%, respectivamente.
El aumento en la originaciones a los segmentos de mayor riesgo podría explicar en parte por qué las originaciones crecen más que el saldo promedio por consumidor. Los consumidores subprime y near prime generalmente reciben cupos de crédito significativamente más bajos en las nuevas tarjetas de crédito en comparación con los consumidores prime y mejores, lo que restringe la cantidad de saldos que pueden tener en las tarjetas y limita el crecimiento del saldo total en tarjetas.
Por otra parte, el desequilibrio entre las originaciones de tarjetas de crédito y el crecimiento en saldos, podría ser el resultado de consumidores que se desvinculan de una entidad y transfieren sus saldos a una nueva tarjeta en otra entidad. En efecto, esto recicla los saldos existentes, pero aumenta el número de tarjetas nuevas abiertas (originaciones).
Como en trimestres anteriores, los bancos continuaron representando la mayor parte del crecimiento total de nuevas tarjetas. Las nuevas tarjetas tradicionales incrementaron 26,5% año contra año en el segundo trimestre de 2019, comparado con un aumento anual de solo 0,6% para las nuevas tarjetas de marca privada y una reducción de 6,0% para las nuevas tarjetas tipo retail con franquicia.
Para los créditos personales, los segmentos de riesgo más altos y bajos mostraron los menores crecimientos en nuevos créditos en comparación con los segmentos de riesgo medio, además de registrar menor crecimiento en comparación con el observado en el segundo trimestre de 2018. Los consumidores near prime, prime y prime plus (riesgo medio-alto, medio y medio-bajo) crecieron en 18,6%, 22,8% y 14,9% anualmente en el segundo trimestre de 2019, respectivamente, por encima del crecimiento anual de 3,8%, 6,0% y 9,1% evidenciado respectivamente en el segundo trimestre de 2018.
Morosidad por cosecha permite analizar mejor la salud del crédito
Las tasas de morosidad grave a nivel consumidor cayeron año contra año en el tercer trimestre de 2019 para créditos de vivienda, créditos personales y de vehículo. En el caso de las tarjetas de crédito, se vio un aumento marginal, aunque menor al observado entre el tercer trimestre de 2017 y 2018. El comportamiento en las tasas de morosidad grave al tercer trimestre de 2019, marca la sexta disminución anual para los créditos de vivienda y la tercera disminución anual para los créditos personales. Esto se debe en parte al aumento en la participación de consumidores de menor riesgo en estos mercados.
Sin embargo, el estudio advierte que es importante que las entidades no se vuelvan complacientes y utilicen distintas herramientas para analizar el comportamiento de su cartera. El análisis de cosechas mira todas las cuentas originadas en un trimestre y mide las tasas de morosidad de esas cuentas nuevas después de tres, seis, doce o más meses de actividad. Cortes trimestrales sucesivos de nuevas cuentas y sus tasas de morosidad pueden compararse para determinar si un corte en particular, o "cosecha", ha estado mejorando o deteriorándose con el tiempo. De esta manera, los problemas de morosidad no quedan ocultos por las altas tasas de crecimiento en nuevas cuentas.
El análisis de cosechas realizado por TransUnion para créditos personales y créditos de vivienda es particularmente revelador. Mientras las tasas de morosidad están mejorando, para los créditos personales, la cosecha del primer trimestre de 2019 mostró una tasa de morosidad más alta después de tres meses en comparación con el comportamiento, también tres meses después, de la cosecha del primer trimestre de 2018. Del mismo modo, la cosecha del cuarto trimestre de 2018 mostró un deterioro, es decir, un aumento en el porcentaje de cuentas en mora, en comparación con la del cuarto trimestre de 2017. Una tendencia similar se observó también para las cosechas de créditos de vivienda durante los mismos períodos.
"Con el aumento de los niveles de crédito ayudando a impulsar el consumo y el crecimiento económico, es importante que las entidades continúen extendiendo el crédito de consumo de manera sostenible. A medida que las entidades otorgan más crédito a los consumidores de mayor riesgo, es fundamental que realicen revisiones periódicas de la cartera utilizando herramientas como análisis de cosechas para entender la salud de sus carteras y abordar cualquier riesgo emergente. Además, dado que muchos analistas económicos esperan ver aumentos en las tasas de interés en el corto y mediano plazo, comprender el efecto que esto pueda tener en el acceso y la capacidad de pago de los consumidores se vuelve esencial. Independientemente del ciclo económico, las entidades deben buscar una mejora continua en su capacidad para obtener nuevas perspectivas sobre los comportamientos de los consumidores, lo que genera beneficios para todos”, concluyó Olivella.
Sobre el informe de tendencias de crédito en Colombia – Industry Insights Report se puede decir que fácilmente consolida información estadística elaborada y analizada por TransUnion sobre las tendencias de crédito de la población colombiana, en términos de acceso, uso y comportamiento de los principales productos de crédito.
TransUnion analiza la dinámica del mercado para un período de dos años, contribuyendo a entender el comportamiento del consumidor desde diferentes perspectivas: riesgo, edad, región, entre otras. Como compañía global de soluciones y tecnología, para TransUnion la información es una herramienta poderosa. Consciente de esto, TransUnion se dedica a encontrar formas innovadoras de usarla para ayudar a las personas a tomar mejores decisiones.
TransUnion ayuda a descubrir las historias, tendencias y hallazgos detrás de los datos, utilizando información histórica y fuentes alternativas de datos. Esto permite que una variedad de mercados y negocios administrar mejor el riesgo y a los consumidores a manejar mejor su crédito, información personal e identidad. En la actualidad llega a consumidores y negocios en Colombia y más de 30 países más alrededor del mundo en cinco continentes. A través del poder de la información trabaja para construir economías y comunidades más fuertes en todo el mundo. A esto le llama Información para el bien.