Sábado, 28 Diciembre 2024 06:20

Por déficit exploratorio en 2027 Colombia importaría petróleo: Analista

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Por déficit exploratorio en 2027 Colombia importaría petróleo: Analista Imagen-de-Angad-Cheema-en-Pixabay

Aumentará de igual forma importación de gas. La situación que resulta bien compleja es la herencia de pésimas políticas petroleras en gobiernos anteriores.

Sin duda alguna, una muestra de fracaso del modelo económico en Colombia, de la apertura económica y la globalización de los mercados es la triste experiencia del país con los hidrocarburos, recursos que terminaron saliendo a muy bajo costo y pagando unas regalías irrisorias, algo para la vergüenza, repito al país lo timaron de la peor forma, jamás hubo desde 1990 el llamado disparo de la inversión extranjera directa, se confundieron los conductores de la patria con extracción extranjera, algo imperdonable en un país pobre, acorralado por la violencia, la falta de oportunidades y el hambre.

Después de algunas reformas y de abaratar las regalías, el petróleo salió prácticamente gratis y lo grave del tema, a la fecha es que ni siquiera gratis las grandes petroleras quieren saber de Colombia y no es un tema de hoy, ya han pasado varios quinquenios y Ecopetrol y la Agencias Nacional de Hidrocarburos, ANH, son las únicas importantes en el entorno petrolero, las grandes casas exploradoras dijeron adiós.

El país prospectivo de los años 80 y 90 se fue quedando sin nada, solo con el recuerdo de la concesión De Mares, con el pozo Infantas de Barrancabermeja perforado en 1918 y con producción comercial en 1921, la concesión Barco rubricada en 1905 y los grandes hallazgos como Caño Limón, 1983 y Cusiana y Cupiagua 1988 y 1993.

En petróleo las cosas no se hicieron bien más allá de las advertencias hechas desde el Senado de la República en cabeza del congresista Hugo Serrano Gómez, en esos tiempos se hablaba de desabastecimiento y riesgo de importar en crudo entre 2005 y 2006. Los conocedores de la economía petrolera hablaban de más errores y desaciertos que de conocimiento y hojas de ruta pensadas en favor del país, en los gobiernos aperturistas siempre hubo afán por ayudar a las multimillonarias transnacionales que necesitaban acrecentar sus ingresos.

 

 

La importación de crudo no es un asunto nuevo en Colombia, basta con recordar que en 1976 el país salió al mercado internacional en donde gastó 3.000 millones de dólares para importar alrededor de 1.000 millones de barriles del llamado “oro negro”, una medida que según los conocedores fue la consecuencia de baja exploración y de una paupérrima política petrolera que jamás vio el asunto con sensatez, dejando por fuera el largo plazo, generando una compra de crudo hasta 1985 con sus respectivos impactos fiscales.

Hoy la historia se repite, no hay exploración, se firmaron más de 300 contratos que no han servido para nada y el país sigue al garete, ya con compras de gas y mirando de dónde saldrá el dinero para comprar petróleo, una situación apremiante que deberá ser motivo de análisis en el inicio del entrante 2025, un lío que podría agravarse si al mundo le da por una Tercera Guerra, algo que al parecer está muy cerca porque ya hay misiles apuntando a distintos objetivos, lamentable, nuevamente morirá gente inocente por la estupidez e intransigencia de algunos mandatarios absurdos, la tesis de que la guerra no prueba inteligencia medida en armas sino imbecilidad medida en víctimas.

Seguro que en las guerras anteriores muchos fueron abatidos sin saber ¿por qué?, razón tienen algunas personas en sugerir el fin de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, OTAN, alianza del terror que en décadas ha mostrado que llegó para ponerle límites a las libertades y derechos de la humanidad. Hoy más que nunca el globo demanda sinergias por la vida y la dignidad más no por agredir o despojar a los menos fuertes, algunos con la tragedia de tener en sus territorios recursos naturales de gran valor.

 

 

Nunca es tarde para el reencuentro y será grato saber que por fin el ser humano estrenó el cerebro pues inventar para acabar es de absurdos, lo ideal sería ponerle fin a las enfermedades, nutrir los pueblos miserables y generar nuevas maneras de producir alimentos sin envenenar las especies incluidos los humanos, es hora de pensar que sí se puede y que cada quien debe vivir bajo sus creencias, sus costumbres y sus posibilidades, llegó el momento de minimizar falsos poderes y ponernos del lado de Dios, ese ser supremo que también resultó lastimado con tanta maldad y ansias de poder.

Hay muchos inconvenientes en el planeta, la humanidad urge de un verdadero líder que logre una mesa de concertación en donde se bajen los ánimos bélicos y caso opuesto se exacerben los económicos, sociales y ambientales sin dejar por fuera valores con el respeto como gran pilar.

Retomando el tema de hidrocarburos hay mucho por hacer, pero al derecho, con planeación, metas y con utilidad, no es justo que Colombia haya perdido la renta petrolera solamente por hacer favores a quienes les sobra el dinero como parte de una política que ni Milton Friedman o Friedrich von Hayek hubiesen avalado.

 

 

En charla con Diariolaeconomia.com, el Coordinador Académico de la Escuela de Petróleos en la Universidad Industrial de Santander, UIS, Oscar Vanegas Angarita aseveró que al revisar las reservas de crudo en Colombia es inminente el tener que importar petróleo porque hubo relajamiento y baja exploración, un descuido que el país tendrá que asumir económicamente.

En Colombia, indicó el versado, el 84 por ciento de los hallazgos hacen parte de los campos menores que dificultan el cierre financiero como por ejemplo todo el gas que se ha descubierto costa afuera con kronos, Orca, Calasu, Gorgon, Molusco, Sirius otrora llamado Uchuva, Brama, Purple Ángel, Arazá, Mapalé y Glaucus entre otros que tienen al término de la ecuación dificultad en el cierre financiero teniendo en cuenta que la exploración offshore es mucho más costosa y complicada pues poner una plataforma de exploración supera fácilmente los 100 millones de dólares sin contar que se necesitan como mínimo 80 personas para su operación.

Según el ingeniero de petróleos al revisar la inversión extranjera directa en petróleo que está llegando a Colombia, llama la atención que las empresas que han recibido bloques de la ANH son firmas que no están dentro del Top 100 ya que las única grande es Ecopetrol, las grandes, anotó se fueron pues no están BP, Texaco, Chevron, ExxonMobil, menos Shell o Conocophillips por hablar de algunas multinacionales de experiencia.

 

“Las grandes se fueron, hoy tan solo hay un grupo de empresas chichipatas y otras que algunos ya consideran grandes como por ejemplo Gran Tierra Energy, Parex, Geopark, Frontera Energy o SierraCol, compañías que no son de gran tamaño a nivel mundial, tan solo grandes en el contexto colombiano, pero al mirar la cantidad de crudo extraído por estas compañías no dejan de ser ínfimas puesto que Ecopetrol produce más del 70 o el 80 por ciento del crudo colombiano, el 88 por ciento de gas que se obtiene en Colombia es de Ecopetrol, pero empresas realmente representativas como Occidental o BP, Texaco, Shell y otras gigantes desaparecieron del plano nacional, hoy no existen”, señaló el catedrático en petróleo de la Universidad Industrial de Santander, UIS.

 

 

 

Anteriormente, añadió Oscar Vanegas Angarita, Ecopetrol era pequeña comparada con las citadas multinacionales, hoy, expuso, la grande es Ecopetrol, lo que muestra que la industria petrolera de Colombia es demasiado débil pues no tiene capacidad financiera en inversiones o exploraciones. Dijo que las sumas y restas no ayudan y caso opuesto opacan el panorama porque si a la gran cantidad de contratos existentes se le restan los que están en proceso de terminación, los que no operan por líos con la licencia ambiental, consultas previas y otros aspectos, generalmente no quedan más de 70 contratos en etapa exploratoria.

Indicó que al tomar los 70 bloques para aplicarles la probabilidad de éxito el asunto sigue engorroso por cuanto la famosa probabilidad de éxito en Colombia es del 12 por ciento es decir ocho o diez contratos con posibilidades en promedio. Precisó que al analizar el mar de descubrimientos estadísticos en Colombia y como se anotó, el 84 por ciento son campos menores que son descubrimientos de menos de 100 millones de barriles, lo que quiere decir que si en esos 70 contratos en diez hay petróleo, el máximo potencial de reservas a descubrir en esos pozos sería de 1.000 millones de barriles que entrarían como reservas originales, pero si a esa cifra se le aplica el factor de recobro teniendo en cuenta que todo el crudo que está bajo no se extrae pues en más de 100 años de historia en Colombia se ha sacado el 17 por ciento del crudo descubierto, lo que se conoce técnicamente como factor de recobro, al que si se le aplica una tabla del 20 por ciento en su cálculo, eso implica que a esas reservas pendientes por descubrir con esos contratos que en aportarían en promedio 1.000 millones de barriles, habría que sumarles a las reservas probadas 200 millones de barriles, eso reiteró, aplicando un factor de recobro del 20 por ciento el que considera alto comparado con el histórico.

 

 

En su análisis Vanegas Angarita expuso que 200 millones de barriles no es nada porque en la actual producción de 780.000 barriles por día en Colombia, se producen cerca de 300 millones de barriles anuales, luego hay que hacer efectivos, reales y dinámicos los contratos porque con el déficit exploratorio y el factor de recobro, el país tendría crudo para incorporar a las reservas. Son, dijo el conocedor, 200 millones de barriles aproximadamente que no alcanzan para la producción del año, es decir que Colombia está en serios problemas, totalmente grave porque lo que se tenía descubierto se ha ido sacando y por eso la relación reservas-producción da para el suministro de un tiempo muy corto.

 

“Yo creo que en 2027 estaríamos importando petróleo a raíz, obviamente, de la parálisis de la actividad exploratoria del actual gobierno que tendrá efecto, no en el gobierno Petro sino en el que venga que tendrá que comprar crudo en el mercado internacional y gas igual destino porque si bien ya se viene importando una cantidad pequeña proveniente de Trinidad y Tobago por Pasacaballos para las plantas de generación eléctrica, lo cierto es que en 2025 habrá que acrecentar las compras gasíferas para el consumo industrial, comercial, vehicular y doméstico, una adquisición que tendrá que hacerse a partir de julio del año que apenas prende motores”, reveló el ingeniero de petróleos y analista de hidrocarburos Oscar Vanegas Angarita.

 

Especuladores al día

EL Coordinador Académico de la Escuela de Petróleos de la UIS afirmó que el problema que tiene la industria petrolera no viene del actual gobierno ya que es una herencia de mucho más atrás con la creación de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, ANH, entidad que asumió la facultad de adjudicar contratos a diestra y siniestra sin que se cumplan requisitos de idoneidad, capacidad o músculo financiero por parte de los inversionistas, situación que jamás se experimentó antes de la puesta en marcha de la ANH ya que la Empresa Colombiana de Petróleos, Ecopetrol, no concedía áreas a una empresa que no fuera Top 100 es decir exigía que quien intentaba ingresar con exploración estuviera dentro de las 100 mejores empresas petroleras del mundo.

 

 

Lamentó que la ANH empezó a otorgarles bloques a inversionistas de bajo perfil e inclusive a ganaderos que no contaban con los recursos para poder hacer ese tipo de trabajos en exploración, llegaron firmas que no eran competentes y para rematar no estaban dispuestas al riesgo porque para nadie es un secreto que la industria petrolera es un Baloto pues de cada 100 pozos que se perforan, 95 salen secos, luego la probabilidad de éxito es muy baja y por el contrario el nivel de inversión es muy alto, luego el negocio petrolero de no es para ganaderos ni empresarios comunes y corrientes sino para quienes están dispuestos a tener un capital de riesgo y a perder.

 

“Aquí en Colombia muchos se volvieron petroleros con bloques de la ANH, los que fueron adjudicados desde 2004 y que siguen vigentes sin ninguna razón ya que, a los seis años, si no ha habido éxito exploratorio, los inversionistas devuelven el área y se da por terminado el contrato sin ningún inconveniente. Lo grave es que existen bloques con diez o más años con cero inversión y ninguna actividad hidrocarburífera y las áreas no fueron devueltas y tampoco terminadas las estipulaciones”, aseveró el connotado ingeniero de petróleos y consultor Oscar Vanegas Angarita.

 

En opinión del experto, de manera preocupante en Colombia hay una serie de especuladores que le dieron vida a un carrusel que con título en mano buscan inversionistas sin poner un solo dólar, dicen ser dueños del predio para capturar incautos en el extranjero y llevarlos bajo la figura de sociedad a realizar unas inversiones que no tienen estudios ni análisis de factibilidad, una realidad que sigue viva en Colombia pues hay muchas personas con áreas de la ANH que no tienen estructura financiera y pretenden ganarse la lotería con dinero foráneo.

Es por eso que en la ANH han adjudicado más de 300 contratos con el agravante que algunas de estas firmas son creadas en paraísos fiscales razón por la cual más de 60 empresas son de papel lo que igual explica que el margen de incumplimiento en los compromisos adquiridos es del 65 por ciento, tema complejo porque son los recursos comprometidos en inversión para la exploración y como dice el dicho “el que no busca no encuentra” y tristemente las estadísticas muestran que a Colombia no han llegado últimamente inversionistas serios pues no se han hecho las inyecciones de capital en exploración y como reza el adagio criollo para ganarse la lotería es necesario comprarla.

Hoy con la nueva política del presidente Gustavo Petro, algunos tenedores de bloques empezaron a devolverlos y con mayor celeridad debido a la reforma tributaria de 2022 que se fue lanza en ristre contra la industria petrolera puesto que le cargó la reforma impositiva al sector petrolero en un 70 por ciento pues le desmontó prebendas tributarias que las empresas traían de atrás como tarifas por exportación de crudo, el no pagar impuesto de remesa una vez liquiden sus utilidades así como el no pago de arancel para la importación de maquinaria para el sector de los hidrocarburos, en esa reforma, dijo Vanegas Angarita, quitaron los favores que recibía la industria y por el contrario le adicionaron más gravámenes.

 

Hay que rehacer política y recuperar renta petrolera

 

 

Con cargo a unos contratos leoninos recurrentemente señalados por el fallecido Senador de la República Hugo Serrano Gómez, el petróleo en Colombia sale del territorio casi gratis pues se hicieron concesiones muy afines a la época de la colonia, una herencia de presidentes como Andrés Pastrana y Álvaro Uribe, en esos “negocios” refutables desde todo punto de vista, expresó Vanegas Angarita ya que la participación para el país fue casi de cero, a duras penas, manifestó, reconocen unas regalías que en el gobierno de Andrés Pastrana fueron ridículamente disminuidas del 20 al ocho por ciento con cómodos descuentos, lamentable una riqueza que se fue y quedó en el bienestar de otras personas en otros países.

Lo tristemente alarmante es que hoy en día ni regalándoles el petróleo las operadoras llegan a Colombia, una de dos, les da temor o mucha pena, claro que podemos omitir tranquilamente la segunda opción.

 

Hay salvación

 

 

Ya en el cierre de la conversación, el ingeniero de petróleos y consultor Oscar Vanegas Angarita anotó que pese al gris panorama que se avizora en hidrocarburos, una realidad que no se puede soslayar, hay una luz al final del túnel. Para el profesional la salida de Colombia y del mundo será el hidrógeno cuántico que para fortuna de todos tiene todas las posibilidades en el país en donde está toda la inventiva, A juicio del experto se trata de un hidrógeno muy competitivo y de bajo costo porque sale a menos de un dólar el kilo, escenario que lo hace rentable.

Recordó el invitado que el hidrógeno es una energía vetusta pues data de hace 150 años cuando el científico inglés Michael Faraday en 1831 presentó su gran invento, el electrolizador, un aparato que facilita la obtención de hidrógeno a través de un proceso químico llamado electrólisis el cual separa las moléculas de hidrógeno y oxígeno, las mismas de las que se compone el agua, haciendo uso de la electricidad.

En ese momento con el trabajo del brillante Faraday se habló se la energía del futuro, pero lastimosamente el proyecto nunca tuvo cierre financiero porque salía demasiado caro habida cuenta que producir con electricidad un kilo de hidrógeno rompiendo el agua significaba hacer un gasto superior a los 50 kilovatios hora cuando con ese mismo kilo de hidrógeno no se generaban más de 33 kilovatios hora, es decir una pérdida energética y económica que para la época no era rentable.

 

“Hoy en Colombia está el hidrógeno cuántico que igualmente necesita romper el agua, pero sin un consumo energético alto sino menos de un kilovatio hora, una energía que se puede aprovechar con sus ondas gravitacionales que son las que en su mayor parte aportan para fragmentar la molécula y por esa vía poder obtener un hidrógeno muy barato que será sin duda la salvación de los colombianos porque este elemento es un energético verde que cuando se quema produce agua más no monóxido de carbono ni CO2, seguramente lo más ecológico que se utiliza como energético en el mundo porque las energías alternativas como paneles solares y turbinas de viento que necesitan minerales ejercicio que al final del día termina siendo igualmente contaminante. La solución para el mundo es el hidrógeno, se viene diciendo desde hace más de 100 años, el tema pasó de agache, pero ya nos tocó y para dicha nuestra esa tecnología la tenemos en Colombia”, concluyó el Catedrático y autoridad en el tema de hidrocarburos Oscar Vanegas Angarita.

 

 

 

La idea es apostar por el hidrógeno al máximo porque de este elemento hay mucho, tiene todo un arco iris ya que hay hidrógeno verde, gris, azul, blanco y de todos los colores, pero ninguno tiene cierre financiero, solamente el cuántico la gran salida para el país.

Sin vacilación alguna hay que echar mano del hidrógeno cuántico porque será esencial en la lucha contra el calentamiento global generado por la emisión de Gases Efecto Invernadero, GEI, toda una cruzada global con marcada prioridad. Según estudios del gobierno, el Acuerdo de París de 2015 recoge la necesidad de mantener el aumento de la temperatura media del planeta por debajo de los dos grados centígrados, como recomendación preponderante a trabajar con el fin de que la temperatura ni suba de los 1,5 grados centígrados.

Para los involucrados en el impacto del clima la contribución determinada para el capítulo Colombia compromete reducir las emisiones del 51 por ciento en 2030 y hacer todo lo posible por alcanzar la carbono-neutralidad para 2050 y en ese plano el hidrógeno es considerado como una herramienta esencial para lograr los objetivos.

El ejecutivo sabe y tiene claro que el hidrógeno de bajas emisiones abrirá las puertas a un mercado mundial en donde Colombia tendrá un papel más que destacado. El hidrógeno se conoce por ser el elemento más simple de la tabla periódica y por ser también versátil y altamente reactivo por lo que no se le encuentra libremente en la naturaleza sino combinado con otras moléculas. Por ello el hidrógeno no es una fuente de energía sino un vector energético por cuanto debe utilizarse energía para su obtención.

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