El informe anual Perspectivas del Comercio Internacional de América Latina y el Caribe 2018, presentado por la secretaria ejecutiva del organismo regional indica que este incremento se compone un alza de 7,6% en los precios y de 2,1% en el volumen de las ventas al exterior.
No obstante, "pese al alza observada, el volumen de las exportaciones de la región crecería menos de la mitad que el de los envíos del conjunto de las economías en desarrollo", matiza el documento.
En efecto, según las proyecciones para las economías en desarrollo de la Organización Mundial de Comercio (OMC), se expandiría un 4,6%, más del doble del crecimiento latinoamericano y caribeño advierte el organismo económico regional. La publicación analiza "el impacto que el divergente crecimiento global y las tensiones comerciales causan" en el comercio de la región. Por otra parte, el informe indica que las importaciones regionales de bienes también se recuperarán en 2018, por segundo año consecutivo.
El valor de las importaciones "aumentaría 9,5%, pero, a diferencia de lo que ocurre con las exportaciones, crecerían más en volumen (4,9%) que en precio (4,6%)", explican los expertos.
La evolución del comercio exterior de la región en el año en curso, estará determinada "tanto por la estructura de las canastas de exportación e importación, como por la demanda externa de los principales socios comerciales" de los países latinoamericanos y caribeños.
En el caso de América del Sur, por ejemplo, el crecimiento esperado de las exportaciones se coloca 0,5% arriba del promedio (10,2% en valor). Ese resultado "responde íntegramente al aumento de los precios de los productos básicos, especialmente del petróleo y los minerales y metales", según las conclusiones del informe anual.
Algo similar ocurre en el Caribe, cuya alza de 12,1% está "fuertemente influida por los mayores precios del petróleo y el gas exportados por Trinidad y Tabago", potencia exportadora de gas, primordialmente a EEUU. En el caso de México, el aumento del volumen y el incremento de los precios contribuirán en proporciones similares a la expansión de sus exportaciones, que será ligeramente inferior al promedio en 0,2% (9,5% en total en valor).
El documento señala que "los envíos manufactureros de México y Centroamérica se ven favorecidos por el dinamismo de la demanda en los EEUU", precisa la CEPAL.
Por último, en Centroamérica, "debido a los descensos registrados en productos como el azúcar y el café" el crecimiento proyectado de los envíos (3,6%) se explica totalmente por el aumento del volumen exportado, ya que los precios de la canasta exportada caerán levemente (-0,8%).
Exportaciones a China y a EEUU
Las exportaciones a los principales socios comerciales de América Latina y el Caribe, que son China y EEUU, aumentarán 28% y 7,1% respectivamente, según el informe Perspectivas del Comercio Internacional 2018 de la Comisión Económica para América Latina.
Las ventas a China que "se componen casi íntegramente de materias primas y manufacturas basadas en recursos naturales", registrarían la principal alza (28%) en 2018, situación que "refuerza la especialización exportadora de productos primarios de la región", especialmente de América del Sur, indica el informe presentado en Ciudad de México
En contraste, las exportaciones a la propia región y a los EEUU "se caracterizan por un mayor contenido de manufacturas", pero crecerían a tasas significativamente más bajas: 12% y 7,1%, respectivamente, señala el infirme anual de la institución regional de la Organización de Naciones Unidas (ONU) que presentó su secretaria general Alicia Bárcena.
Por otra parte, China es el segundo país de origen de las importaciones de la región, después de EEUU. En cuanto a las importaciones de mercancías procedentes del gigante asiático son las que "presentan el mayor dinamismo".
En efecto, las importaciones de productos chinos "se componen casi en su totalidad de manufacturas que compiten con la producción regional" en varios rubros advierte el documento de la CEPAL. El documento se refiere además al marco de la guerra comercial entre EEUU y China, exacerbada por las políticas comerciales proteccionistas de la administración del presidente Donald Trump.
Esas tensiones "tienen como telón de fondo la disputa por el liderazgo económico y tecnológico mundial, así como el debate sobre la coexistencia de distintos estilos de desarrollo", consideran los expertos del organismo regional. Según la CEPAL, en el corto plazo, estas tensiones "podrían tener un impacto positivo en las exportaciones regionales, pero una mayor escalada proteccionista acarrearía serios riesgos para la economía mundial y, por ende, también para la región", advirtieron los analistas.
En ese marco, la integración regional "resulta indispensable para avanzar en la diversificación de las exportaciones y en la transición hacia una canasta exportadora más intensiva en conocimiento, considerando el elevado contenido industrial del comercio dentro de región y su importancia para las pymes (pequeñas y medianas empresas) exportadoras", resaltó la diplomática mexicana Bárcena.
La secretaria general del organismo estimó "necesario intensificar los esfuerzos dirigidos a construir un mercado regional integrado dado el contexto de ralentización del crecimiento, salida neta de capitales y creciente proteccionismo al que se enfrenta la región, que probablemente se agudice en 2019".
En el segundo capítulo del informe, la CEPAL indica que la región en su conjunto es una exportadora neta de minerales y metales, con un 8% de participación en las exportaciones mundiales de este sector. La participación de las materias primas en las exportaciones de minerales y metales de la región, casi se duplicó en los últimos 20 años a 37%.
Ese comportamiento se debe "en gran medida, a la demanda de China y el resto de Asia", explica el análisis. La CEPAL considera que esta situación "es preocupante, debido a los conocidos problemas asociados a la dependencia de la exportación de productos básicos mineros", alerta el documento.
El organismo también llama la atención a otros factores como "la vulnerabilidad de las exportaciones, el crecimiento económico y los ingresos fiscales ante las fluctuaciones de precios; la escasa agregación de valor y diversificación hacia nuevos productos y servicios; y los diversos tipos de daños ambientales", puntualiza el documento.