Rusia, un país con grandes riquezas en recursos naturales, agrícolas, acuíferos y un marcado poder energético, es una nación antigua que ha dejado un sinnúmero de legados a través de la historia. Según los investigadores los primeros asentamientos humanos se dieron hace dos millones de años en promedio cuando hubo actividad en el periodo olduvayense en pleno Paleolítico Inferior. Era el momento del Homo erectus que se desplazó al sur de Rusia, puntualmente a la península de Tamán.

La prehistoria rusa es bien interesante los exploradores igual hallaron utensilios y herramientas de pedernal que datan de 1.5 millones de años, de todas maneras, al revisar cuevas como las de Denísova, se establece, según la ciencia, que el hombre más antiguo en la región habitó hace 195.000 o 122.700 años.

El macizo de Altái dejó ver que en la cueva de Denísova hubo vestigios de “Denny”, una mezcla primitiva entre neandertal y denisovano, híbrido que estuvo en el lugar hace 90.000 años aproximadamente, de los arqueólogos sostienen que Rusia fue el techo de los últimos neandertales que lograron sobrevivir hace 45.000 años y que finalmente quedaron como registro en la cueva de Mezmáiskaya.

Rusia o la Federación de Rusia es el país con mayor extensión en el globo, su superficie alcanza los 17’125.191 kilómetros cuadrados, posee una geografía diversa, con múltiples relieves y una serie de ecosistemas que lo ponen en una cima estimable en temas naturales y de biodiversidad.

La ciudad federal de Moscú es su capital, Rusia es un mercado bastante sugestivo y por ello hacer negocios con esa nación ofrece todo tipo de oportunidades, no en vano es el noveno país en población, hoy reporta más de 145´478.097 habitantes.

Los rusos tienen 16 fronteras y sus litorales igualmente amplios tienen aguas del océano Glacial Ártico, la parte norte del océano Pacífico, pero igual suma mares demasiado locales como es el caso del Báltico, el Negro y el Caspio.

 

 

Como se sabe, la historia rusa es sumamente amplia pues emerge con las aldeas eslavas del este, empero los eslavos como tal surgen y se hacen un grupo identificable de Europa entre los siglos III y VIII después de Cristo.

En el siglo IX florece la Rus de Kiev, el primer Estado de los eslavos de oriente. Los expertos en el tema Rusia aseguran que en el año 988 este pueblo acepta el cristianismo ortodoxo ya que la evangelización en ese territorio se hizo a través del imperio bizantino que encargó para esos sagrados menesteres a Cirilo y Metodio.

Con esa articulación de culturas, la eslava y la bizantina, durante el siguiente milenio se concretó la identidad y cultura rusa. Con el tiempo la Rus Kiev se atomizó y por ello surgieron no pocos estados feudales, el más fuerte el principado de Vladimir-Súzdal que con el tiempo se convirtió en el principado de Moscú poder esencial en la tarea de reagrupación rusa, pero igual el bordón sólido para combatir y lograr la independencia de la Horda de Oro, esa tropa de mongoles establecidos en el territorio que ejercieron su poder y gobernanza en Rusia, Ucrania, Kazajstán, Moldavia y en general en el Cáucaso desde 1240 hasta 1502.

Con la reunificación de los principados rusos vecinos arrancó una potestad que permitió fortalecer la transferencia política y cultural de la Rus Kiev. En el siglo XVIII las expansiones rusas logradas con conquistas y adhesiones hicieron del país el tercer imperio más grande en la historia de la humanidad.

La muy bella Rusia, anhelada y admirada por todos, tuvo desde 1547, 28 zares que comandaron el imperio, luego vinieron cuatro presidentes al afianzarse la Federación de Rusia instaurada en 1991, una prueba de que los rusos tienen historia atávica y reciente.

 

 

Son muchas las épocas y los momentos de Rusia, hay nombres que hicieron historia, Iván el Terrible, Pedro el Grande, Catalina II de Rusia, pero igual enormes literatos que permitieron contemplar al ser humano y a una nación grandilocuente, verbigracia León Tolstói que inmortalizó obras como Guerra y Paz, Anna Karenina, Infancia, Adolescencia y Juventud, pero igual la Muerte de Iván Ilich, también marcaron un hito en literatura Fiódor Dostoyevski, Máximo Gorki, Iván Turguénev, Vladimir Mayakovski, la retadora poetisa Anna Ajmátova, Vladimir Korolenko y muchos otros escritores de fina pluma.

En la parte política figuran Lósif Stalin, Vladimir Il’ ich Lenin, Mijaíl Gorbachov y el mismo presidente actual Vladimir Putin.

La cautivante Rusia ha brillado en múltiples campos, básicamente en artes y ciencias, pero igual es reconocida por su poderío militar, una estructura agrícola de gran tamaño y unas reservas en hidrocarburos que muchos envidian. Rusia, aseguran en el mundo, ofrece calidad en todo lo que vende.

Este país tiene la tercera área sembrada más grande del mundo, alrededor de 1´265.267 kilómetros cuadrados, empero por lo duro del entorno cerca del 13.1 por ciento de los suelos rusos son agrícolas, pero solo el 7.4 por ciento de sus tierras con cultivables.

Rusia es el gran abastecedor de granos y cereales de Europa y el mundo, buena parte de su agricultura está expresada en siembras forrajeras, también hay cultivos industriales, hortalizas y frutas. A nivel mundial Rusia es el principal exportador de trigo, es tremendamente fuerte en la obtención y exportación de cebada y un jugador considerable en el suministro de maíz y aceite de girasol.

Por sus inmensas reservas de gas y petróleo este país euroasiático es el principal exportador de fertilizantes. Rusia logró afianzarse como la sexta industria pesquera más robusta del planeta, la captura de peces supera los cinco millones de toneladas anuales como ocurrió en 2018. Rusia ostenta el tener el mejor caviar del mundo y es trascendental en la oferta de pescado enlatado como también en pescado congelado y fresco a nivel global.

La muy atrayente Rusia tiene todas las características de un gran país, hay gentes buenas, trabajadoras y llenas de ideas que contribuyen al crecimiento de su economía así como de la industria, hoy el país del encanto tiene otra particularidad, gusta de tomar café diferenciado y de sacar provecho del estimable portafolio de grano que hay en el mundo, sin embargo, hay preferencia por el café colombiano que fue entrando a la Federación Rusa para enamorar paladares y quedarse.

El sector de tostión es importante para la comunidad rusa que lleva los mejores granos con el fin de preparar o poner en góndola un café de distintos orígenes, pero con gran apego por el grano colombiano que hoy se caracteriza por nuevas variedades, mejores propiedades y atributos considerables en taza. En Rusia saben de café y están seguros que el de Colombia, el del caficultor Juan Valdez y su mula “Conchita” es sin duda el de mejor sabor y aroma, un esfuerzo hecho en las montañas andinas de Colombia y en serranías imponentes como la Sierra Nevada de Santa Marta o la del Perijá en donde cánticos arhuacos, koguis, wiwas y kankuamos, igualmente wayuu junto con el chillido de las águilas y la fauna silvestre adornan, enaltecen y celan por encargo de la Madre Tierra los cafetos que serán cosechados y tostados para llevar por el mundo entero el verdadero sello del país de la cumbia, el porro, las guabinas, el torbellino, el bambuco, la rajaleña y el vallenato.

 

 

En charla con Diariolaeconomia.com, la empresaria rusa Elena Lokteva experta en la selección, tostión y exportación de café afirmó que conoció Colombia y se enamoró del país suramericano por el aromático bebestible, dijo que hoy es una embajadora del café colombiano, producto de coloridos altozanos que la llenan de pasión y compromiso por la calidad del grano al que le ha encontrado grandes particularidades.

Lokteva lleva en el país algo más de 12 años y creyó tanto en el café colombiano que decidió asociarse para fundar Tourist Coffee y Native Seeds, dos firmas que representan el mejor producto de Colombia tras una selección rigurosa y llena de conocimiento. Su cafetería ubicada en el sector de Pasadena en Bogotá sirve con toda seguridad el mejor café que se pueda tomar en el país ya que tiene vínculos con los mejores caficultores, esos que apuestan por granos de verdadero atributo.

En la exclusiva Pasadena opera su laboratorio y punto de tostión, toda una garantía para ofertar sin duda alguna el mejor café colombiano, granos de notas espectaculares con fragancia y sabor únicos. Esta iniciativa empresarial se dio tambien por el ímpetu y entusiasmo de Norma Gaitán, la quinta barista en Colombia, profesional que ha ganado dos concursos regionales y que hoy con todo el mundo del café en su cabeza selló una sociedad con Lokteva, una sinergia que llevó a que el proyecto repuntara y se consolidara como un paradigma de café, valor agraegado, exportaciones y un manejo adecuado de los mejores granos, una alianza de gran profesionalismo femenino en diferentes áreas que finalmente llevó el emprendimiento a ese olimpo llamado éxito.

En su negocio, Tourist Coffee, se adelantan todos los procesos de compra y tostión de café, de igual manera hay presentación y catas en la tienda física, un lugar imperdible ubicado en la Calle105 # 46-51, de lejos un sitio ideal para tomar café, hacer negocios o simplemente pasar un excelente momento con variadas opciones de café y todas acompañadas con lo mejor de los amasijos colombianos en el norte de Bogotá.

A Elena la enamora el café colombiano, le encanta el entorno natural y el paisaje cafetero, igualmente la manera como desde hace siglos se fue construyendo una caficultura que logró un desarrollo importante, pero con valores agregados y llamativos tales como que Colombia es de los pocos países productores de café que siguen cosechando manualmente por unos productores campesinos y otros que se volvieron empresarios, una labor destacada y de suma importancia para la economía y los temas afines con el tejido social.

 

 

La empresaria tiene preferencia por los cafés de atributos en donde se note el perfil en taza, el mismo que posibilita variedad en sabores y distintos procesos, aclaró que no puede decir que le atraen los granos lavados o de alguna particularidad definida aunque reconoció que hay en Colombia unas variedades muy bien manejadas que los productores lo siguen cultivando como el Colombia Amarillo, variedad obtenida por el Centro de Investigación del Café, Cenicafé, que ha explorado calidades y probado en microclimas, un grano que gusta demasiado cuando muestra su perfil o Terroir, la combinación de factores naturales que desprenden de la calidad de suelos, topografía y microclima como instrumento para el productor.

Dijo que en Rusia está creciendo de manera importante el tema de cafés de especialidad puesto que desde hace unos 15 años se empezaron a ver en su país más tiendas de café, aumentó el número de concursos, crecieron las certificaciones y los viajes que tienen como objetivo aprender de la plantación cafetera, pero asimismo de las empresas que hacen parte de la cadena de valor y suministro de café.

 

“Obviamente hay mucho intercambio de conocimiento y creo que ese es un atributo de Colombia, país pionero en investigaciones que logró desarrollar muchas cosas. En Rusia se está tomando más café sobre todo si tiene trazabilidad y si cumple con los valores adicionales tales como impactar positivamente los aspectos sociales y ambientales. Las tostiones han sido diversas porque hay gente que prefiere café más oscuro y un tostado más fuerte, hay en el portafolio ruso y del mundo la opción de cafés mezclados con leche, expreso y otros consumidores que buscan cafés más suaves como los colombianos, lavados, con buena acidez. Lo cierto es que por la globalización hay diferentes gustos y ello conllevó a que crecieran las posibilidades en bebidas, llámense cerveza, vino y otro tipo de licores”, explicó Elena Lokteva.

 

Agregó que en Rusia hay unos vinos muy ricos y famosos a nivel mundial, luego hay un entrenamiento permanente del paladar que sirvió mucho para que en su país la gente que presta atención en comidas y bebidas, demostrara su gusto por el café en sus diferentes expresiones.

 

Cambio climático, un desafío

 

 

Un asunto que hoy tiene a todo el mundo pensando es el cambio climático cada vez más exacerbado, situación que tiene a todos los sectores productivos buscando salidas al problema. Lokteva dejó claro que si bien es un inconveniente, no es nada nuevo porque en café todos los países productores de América Latina fueron afectados por las plagas, contexto que los llevó a tomar medidas muy urgentes para solucionar el apuro, sin embargo, enfatizó, la investigación no para, sigue dinámica y otro aspecto es que la caficultura se ha movido para zonas más altas porque entre 1.800 o 2.000 metros sobre el nivel del mar es menos complicado obtener café, igual, dejó claro, hay situaciones que tienen que ver con nuevas áreas destinadas a café consecuencia de la deforestación, hay otros temas complejos como el de los fertilizantes, su disponibilidad y su costo que ha crecido con cargo a los conflictos a nivel mundial, un punto a considerar puesto que genera desbalance porque a mayor precio de los abonos o nutrientes, el consumidor no está dispuesto a pagar más y es el labriego quien resulta perjudicado.

Ante ese desbalance, explicó, los caficultores están buscando nuevas soluciones que no solamente pasan por trasladar o mover sus cultivos a zonas más elevadas, sino que además los ha llevado a optimizar los manejos y beneficios sin dejar por fuera las opciones nutricionales orgánicas para los cafetos. En síntesis, una serie de labores que ayudan a mantener la calidad del café adoptando nuevos conceptos, por ejemplo, permacultura o caficultura regenerativa, procesos que demandan educación y desafortunadamente muy pocos productores tienen acceso a esa información pues apenas hace 10 años empezaron a capacitar a los caficultores paso a paso porque la caficultura colombiana sigue siendo de gente mayor de edad.

En ese orden de ideas, precisó Lokteva, la educación tiene que ser adecuada para que los cafeteros puedan asimilar las nuevas tareas y logren por esa vía la sostenibilidad.

En lo atinente a micro-lotes de café, la fundadora de Tourist Coffee dijo que ese aspecto es muy común en los pequeños productores del grano que generalmente son mayoría, propietarios de menos de cinco hectáreas y que son los que apuestan por el micro-lote de café diferenciado. La experta anotó que ese tipo de obtención siempre ha existido solo que en los tiempos anteriores los conocidos micro-lotes fueron despreciados y mezclados para completar contenedores, vender y suplir al mundo del consumo que sigue creciendo año tras año a razón de tres y siete por ciento en diferentes países.

 

 

En su análisis estimó que los caficultores seguirán teniendo un café corriente o commoditie porque sigue existiendo la bolsa para los cafés que comercializa o hace contratos por contenedores, es decir que si sigue existiendo ese mecanismo bursátil continuará el reinado de los commodities, un negocio matizado por la especulación, manejado por personas que poco saben de café, pero que hacen contratos.

 

“Últimamente ha crecido el sistema de siembra cafetera por micro-lote y de hecho para el productor este método a significado una considerable ganancia porque el café necesita un manejo mucho más puntual, de mayor exigencia y con agregación de valor al micro-lote, pero creo que seguirán vigentes las dos opciones porque el mundo sigue consumiendo café en cantidades impresionantes y por ello las bodegas siempre tendrán que estar llenas”, apuntó Elena Lokteva.

 

Un café colombiano, con toda seguridad, cae muy bien en San Petersburgo, Moscú, Novosibirsk, Nizhni, Nóvgorod, Ekaterinburgo, Samara, Omsk, Kazan, Cheliabinsk, Perm, Rostov del Don, Ufa, Volgogrado y otras en donde una buena taza de café hace que la vida tenga más sentido, que los momentos sean espectaculares y que la experiencia se quiera repetir.

El ejemplo, dijo Lokteva, podría traer a colación los vinos chilenos que según algunos sabe diferente al otro lado del mundo, pero en café, expuso, tanto en Moscú como en San Petersburgo hay tostadores muy profesionales y llenos de conocimiento tanto así que hay un campeón mundial ruso, Vladimir Nenashev quien ganó un concurso en 2018, pero como ese conocimiento de trasmite, Rusia ha tenido más gente concursando y llevándose los grandes premios, ello porque son muy dedicados, apasionados y cumplen con la misión de visitar el origen para tener mayor conocimiento y ver todo el tema de la trazabilidad.

 

 

En Rusia, el barismo, la cata y el negocio de café ha crecido porque después de Estados Unidos que tiene vecindad con la Latinoamérica cafetera, los rusos vienen detrás, haciendo muy bien la labor de mejorar el sabor del café, de hacerlo un instante único, todo eso es posible, añadió la conocedora, porque hay un contacto directo con las zonas de cultivo, aprender de orígenes, ver toda la trazabilidad y entender mejor cómo se está sembrando el café y cómo funciona toda la cadena de suministro. Por todo lo que se ha hecho puede decirse sin temor a equivocarse que Rusia ha sido vanguardista en el tema cafetero razón por la cual propios y visitantes pueden acceder a cafés de enorme condición en cualquier ciudad rusa o del mundo muy a pesar de las restricciones aplicadas a los ciudadanos rusos para participar en las competencias.

 

“Hoy es imposible ver a un ruso compitiendo en concursos de filtrados, barismo o catación porque obviamente la asociación lo prohibió a causa de los conflictos que hay , pero por fortuna existen competencias propias y el café igual sigue siendo un producto muy importante que posiblemente ya le esté ganando al mercado del té que es de preferencia de muchas personas en Rusia porque se bebía el té por la cercanía con China y con otros países asiáticos, además porque Rusia tiene gran variedad en bebidas aromáticas que también fueron precursoras para abrirle espacio al té, de todas formas, el café es una bebida que está siempre presente poniéndole sabor, aroma y color a las mañanas.

 

Aparte de San Petersburgo, hay zonas más al sur en donde se encuentran muy buenos tostadores y una excelente distribución en línea. Actualmente la inversión en Rusia está creciendo de manera exponencial porque una vez salieron las marcas americanas Starbucks y McDonalds, así como otros distribuidores de la bebida, a Rusia llegó un boom de café porque solamente los rusos pueden tostar para abastecer el mercado interno que por fortuna es de gran tamaño.
Hoy en Rusia hay un visible crecimiento de marcas y eso a juicio de Lokteva, impulsó muchas industrias entre las que está el café.

Por estos días la muy amable empresaria irá a Rusia, pero indicó que muy a pesar de la distancia y de la dificultad para importar café por la complejidad en los puertos que anteriormente para el tema café dejaban ver una valiosa eficiencia, por la triangulación ya que debe acudirse a otros países y pagar más impuestos para tomar buen café, por líos de logística y otros del entorno geopolítico, el café colombiano sigue siendo el preferido en Rusia, pero hoy por todo lo citado resulta más costoso comprar grano de Colombia que llega a otros países de Asia, a Estados Unidos y Europa.

 

 

Más allá de los inconvenientes y del apuro logístico, en Rusia se consumen todos los orígenes de café, en ese país la gente adquiere café brasilero, africano, centroamericano, Colombiano y de otras naciones del hemisferio sur. El portafolio es amplio y se logra por las casas importadoras, pero por volumen el café más vendido en Rusia es el de Brasil como ocurre en todos los países, pero los brasileros, anotó Elena Lokteva, aparte de que tiene una elevada producción, mantiene alto el stock en sus bodegas, lo que explica también porque ese consumo crece año tras año.

El café colombiano, manifestó la empresaria, ocupa el segundo puesto y si no está solo, seguramente comparte la medalla de plata con Etiopía o con otros granos africanos.

Los rusos pueden fácilmente encontrar café de Bolivia, Ecuador, Perú, Costa Rica y Panamá en este último por el apetito existente por los cafés geisha del país canalero que son adquiridos a muy buen precio por su comprobada calidad, igual hay espacio para cafés asiáticos y de otros puntos de Centroamérica.

Colombia sigue muy en boga por su café suave, hay productores de grano a gran escala, micro-lotes y mezclas o blend de los grupos de productores colombianos.

Hoy en Colombia hay avances significativos en calidad de café, se ha llegado tan lejos en investigación que es posible obtener múltiples perfiles a partir de granos africanos. Con variedad Típica, dijo, puede integrarse la planta con materiales de otros países, haciendo muy difícil poder identificar un origen exacto. Al margen de ello y en el capítulo Colombia, subrayó la versada en café, hay proveedores que acopian determinadas cantidades en municipios o departamentos, algo que está muy bien definido. Apuntó que el café nariñense sigue siendo el de mayor acidez, con más notas florales y otros atributos, grano que también se puede encontrar en Cauca, Huila, Santander y otras regiones cafeteras.

 

 

Expresó que el Huila es el departamento con mayor variedad, diferentes microclimas, distintos pisos térmicos y un significativo avance en el procesamiento de calidades que allí se encuentran, en donde el café sigue siendo un arábica suave sin importar las enormes distancias de los núcleos de producción.

Aparte del delicioso grano tostado, Elena cuando viaja a Rusia, suele llevar bocadillo veleño, achiras y otros productos que comparte con su familia alrededor de una buena taza de café, de hecho, en Tourist Coffee se vende la muy rica achira en una tarta de queso que no tiene comparación, es deliciosa.

Desde Colombia puede igual exportarse felicidad, la que anheló en el mundial de Futbol el presidente de Rusia Vladimir Putin. Caso contrario de Rusia a Colombia pueden venir muchos productos, pero mirando los más exóticos existe un vino del sur de Rusia que ha ganado concursos y premios de diferentes sumiller y catadores del mundo, un producto que la gente puede tomar en Colombia así como cafés de diferentes tostadoras rusas con distintos orígenes, igual quien visita Rusia no sale sin su matrioshka.

De Rusia Elena Lokteva extraña el teatro y la generosa oferta cultural, igual la arquitectura, de todas maneras son muchos los semblantes que le encantan de Colombia y por eso dice que lo ideal sería vivir cuatro meses en Colombia, cuatro más en otro lugar y los otros cuatro de los 12 meses del año, pasarla en Rusia en el verano o en el invierno que, asegura, también tiene sus buenas cosas. En Rusia hay calefacción en los hogares, pero también en los paraderos de los buses.

En la nieve o en el hielo hay también mucho por hacer, patinar, esquiar y otras actividades que seguramente mitigan el intenso frío.

 

 

Un ejercicio interesante de Elena antes de pisar tierra colombiana fue aprender español y temas culturales, igual entró en el cuento de la salsa por unos compañeros de la universidad que eran colombianos y le enseñaron sobre cumbia, vallenato y otro tipo de música.

 

“Allá en Rusia hay muchos colombianos estudiando ingenierías, medicina, economía, aeronáutica civil y otras carreras. De hecho mis compañeros me enseñaron modismos, me dieron la clave para desenvolverme en Colombia y no dar papaya”, comentó la muy agradable y cordial empresaria.

 

Evocó que primero aprendió a bailar salsa, luego merengue, bachata y otros aires, aunque dice que le falta aprender joropo.

 

 

Elena ve en el café una oportunidad amplia de negocio, pero anotó que hay otros productos como el cacao y otros bienes agrícolas como las frutas, el aceite de palma, aguacate y más que tienen grandes opciones de mercado en Rusia y en el globo. Destacó el modelo de la Federación Nacional de Cafeteros, FNC, el que debería replicar toda la agricultura colombiana para alcanzar el éxito porque hay de por medio asociatividad que igual está llevando prosperidad en palma de aceite.

La empresaria es egresada de la Universidad Rusa de la Amistad de los Pueblos, RUDN, la otrora Patrice Lumumba, la tercera alma mater más importante de Rusia que entre otras cosas es la que tiene mayor cantidad de becas para los latinoamericanos y extranjeros que quieran formarse en ese país.

Los negocios de Colombia y Rusia no se quedan solo en café, hay venta de helicópteros y otros negocios bilaterales lo que muestra una relación sólida y escueta. Un punto para tener en cuenta es que los colombianos no necesitan visa para ingresar a territorio ruso ni los rusos requieren visa para permanecer en Colombia.

Un sector que crece también de manera importante en Rusia desde el año 2000 es el turismo, para nadie es un secreto que se trata de un país apetecido y con mucho por visitar, nada más y nada menos que 40 destinos, museos, parques, lugares y un paquete enorme que va desde turismo cultural y étnico, pasando por aventura y familiar hasta el infantil. Un referente del que debe aprender Colombia que igual cuenta con sitios exóticos y diversidad en fauna y flora.