Los colombianos de a pie, esos que subsisten con un precario salario mínimo recibieron una estocada por parte de las bancadas políticas por las cuales muchos votaron, el honorable Congreso de la República en sus dos cámaras, Senado y Cámara de Representantes avaló el IVA del 19 por ciento con lo cual los nacionales pagarán sus artículos y enseres a mayor precio. Para los conocedores del tema, lo que hizo el ejecutivo en común acuerdo con el legislativo fue apagar un incendio con gasolina que de paso también tendrá impuestos.
El analista económico, Eduardo Sarmiento, declaró en Diariolaeconomia.com que lo que pasó con la reforma tributaria no tiene presentación toda vez que es una iniciativa que contraerá la economía porque golpea duramente el consumo de bienes y servicios.
Aseguró que muy seguramente Colombia entrará en recesión económica porque si a duras penas el país está creciendo por los lados del uno por ciento, con los nuevos impuestos y básicamente con la subida de tres puntos en la tarifa del IVA vendrá una caída espectacular de la demanda, con serias consecuencias en el empleo, en la producción y en el crecimiento.
Recalcó que en un momento de postración de la demanda interna, era un horror subir tres puntos el IVA porque así se castigaría el consumo de los estratos medios y de las clases populares. Esa medida en opinión del experto muestra la poca inteligencia de quienes conducen la economía colombiana y la frialdad de unos congresistas que después de entregar al pueblo muy seguramente y sin ningún tipo de escrúpulo saldrán a pedir votos.
Sarmiento quien ha entregado estudios muy acertados sobre el comportamiento económico aseguró que al gobierno se le fue la mano con los colombianos porque los puso a pagar un error de manejo de política económica con la Enfermedad Holandesa y la concentración de recursos en un solo sector. Esa culpa, sostuvo, no fue de la gente, ni del contribuyente, pues recae sobre las autoridades económicas que mal preparadas y mal asesoradas incurrieron en repetir una historia trágica ya contada.
Para Sarmiento, la decisión llega en mal momento porque hubo medidas equivocadas para frenar la devaluación y el país pasa por una sequía de liquidez y crédito lo que hace pensar que muy seguramente habrá una mayor contracción de la demanda y un raquítico crecimiento que puede acercarse a cero en 2017 lo cual seguirá afectando a los sectores productivos excepto la industria y la construcción a los que ya se les está acabando la fiesta.
“Estamos en serios problemas, el gobierno, como siempre, optó por la más fácil y fue la de gravar a los sectores más vulnerables que son los que sienten el mayor IVA. Al gobierno le faltó inteligencia y al Congreso corazón, sensatez y coherencia porque prácticamente condenaron a más pobreza a sus electores, a los que buscan para pedir votos para luego hundirles la daga por la espalda. Esa es la historia de Colombia y la seguimos repitiendo, pero como dice el dicho, quién no conoce su historia está condenado a repetirla, y de eso vive la clase política”, aseveró el señor Sarmiento.
Para Sarmiento ni el gobierno ni el Congreso sabían que estaban haciendo porque jamás entendieron en qué estaba la economía, además no hubo un estudio serio que mostrará cual sería ese impacto de la reforma sobre los indicadores económicos sino que simplemente se le mintió a la gente diciéndole que subiendo impuestos reactivarían la economía lo cual los deja como unos mentirosos.
Manifestó que no tiene sentido que se hable de una reactivación económica con una reforma tributaria que eleva los impuestos indirectos lo cual hace que no sea expansiva ni progresiva. Aseguró que no es sensato plantear que una economía se reactiva subiendo impuestos.
Crisis en la academia
El experto en temas económicos, Eduardo Sarmiento, lamentó la realidad de la academia económica de Colombia y del mundo porque indicó que para no ir tan lejos la comisión tributaria, los analistas y consejeros del Fondo Monetario Internacional y los encargados de dirigir los destinos económicos del país quedaron totalmente desacreditados.
“Por eso perdieron en el Reino Unido, en donde el Brexit tuvo su razón de ser y perdieron igualmente en Estados Unidos porque los economistas del establecimiento estaban totalmente desprestigiados al punto que Donald Trump los derrotó”, afirmó Sarmiento.
El docto expresó su malestar porque la medida tributaria no solo afecta al comprador sino a quien fabrica porque si alguien quiere comprar una camisa, un pantalón, un vestido, unos zapatos debe pagar tres puntos adicionales de la tarifa y lo mismo le pasa a quien quiera adquirir un enser, un elemento básico o un servicio esencial.
A criterio del analista el gobierno y el Congreso deben dar ejemplo y vía reforma tributaria atacar la evasión y la elusión, pero sin retórica barata o con pamplinas porque el gran hueco fiscal está precisamente por el lado de la evasión y la elusión que hacen los grandes capitales, pero como ya es costumbre el incendio fiscal lo apaga el del salario mínimo.
Finalmente consideró que el país es un total desastre porque los ortodoxos de la política dirigida acabaron con la economía y eso se demuestra con el fracaso en el control de la devaluación, con la subida en las tasas de interés, con la succión total del crédito y de ñapa con la subida de tres puntos al IVA marchitando la demanda haciendo que la economía haya entrado igualmente en caída libre con una crisis que no la para nadie.
En esta reforma concluyó, pasaron por debajo de la cerca muchos con capitales abultados y con poder económico y hasta religioso que hacen que la reforma sea injusta, inecuánime y de fracaso anunciado en donde seguirán pagando impuestos con una nueva y pronta tributaria las millones de almas que enriquecen a tan pocos diablos con disfraz de santo.